El famoso "¿cómo te ponemos?" Y el chasco que se llevan cuando no eres profesor universitario. Lo que lleva a la siguiente pregunta "¿pero dónde estudiaste?" que se resuelve señalando a la estantería de libros.
El otro día en una videoconferencia sobre los libros: Populismos, Fidel castro.. de un profesor italiano, tras mi intervención, se refirió a mi como "profesor Lizundia". No conciben que exista vida fuera de la academia. Yo reivindico al intelectual no académico por disponer de todos los recursos del conocimiento -no solo los científicos, pautados, canalizados- el conjunto de sus lecturas, su experiencia personal, su mundo de intuiciones, analogías, evidencias particulares, haber defendido sus argumentos en el ágora y en las tascas. Su libertad y organización.
Sin pretenderlo comprobé que los de Ensayos Saharianos (la última es profesora), solo uno-- era profesor universitario, Gabriel Restrepo; que resultó el más poético, esotérico, gnóstico de todos.
Como estoy leyendo a Walter Benjamin, no fue académico, ni Sarte, ni Simone Camus, Hannah Arendt, de muy mayor empezó a dar cursos
De abogado y escritor a editor y escritor. Yo creo que has subido de categoría.
1 comentario:
Genial, humor a toneladas, humor con mucha sabiduría. Hay tanta vanidad en las academicas, tanta reverencia, tanta simplicidad encubierta en jergas y tantas citaciones y recitaciones que a veces pareciera estar uno en una casa de citas.
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