martes, noviembre 29, 2022

Lo que amé detesté, lo que aborrecía me subyugó y lo más promisorio se iluminó


                                         



Mi columna de hoy en El Día

 

domingo, noviembre 27, 2022

Sobre mi hermano exclusivamente

-Sabes desde cuando no nos vemos?- me pregunta mi hermano
- Tres, cuatro  semanas...
-No, desde Marbella
 - Si fue en agosto y estamos en navidad casi, ya me extraña 
- Como no te dejas ver-
-Yo solo salgo los lunes y si no estás, que le vamos hacer y tampoco es plan que vengas  a casa a derramarlo todo- 
Mi hermano enseña materias menores en la secundaria de Fuerteventura, y así como muchos profesores tienen miedo a los alumnos, él no. Controla a sus alumnos y mantiene el orden y la jeraquía  cortando de raíz cualquier acto levantisco e indisciplinado con estas palabras o parecidas, en todo caso efectivas:
- No me dais ningún miedo. Durante 26 años he sido abogado penalista y he tratado con todo género de criminales, a los que nunca llegareis alcanzar, porque ya se os ve.
-Te van a pinchar las ruedas del coche como les intimides así, bueno no, porque no lo tienes. 

sábado, noviembre 26, 2022

Diálogo intercultural en la propia familia. Y Zapatero estadista/artista


Mi nieto en casa de sus abuelos indios en Chicago, vestido para una bendición hindú (es la mitad de su herencia), aunque también está bautizado por la Iglesia. Un norteamericano católico e hindú. Yo conozco a otros que les gusta no ser nada, no tener una pertenencia espiritual/cultural, y flotar en el deseo ilusionado de personalidad por descartes y originalidad, puramente suyos. Más brutos, mas cómodos e impregnados se sienten en sus pequeños mundos eternos de progreso. A los que no hay nada que preguntar porque ya conoces todas sus respuestas
Aquí ayer en una misa (no sabía), a la que fui porque los del comedor social de unas monjas en donde trabaja Belén- habían formado un coro (detrás). Va mucho emigrante, por tanto y en general, por los usuarios me resultaba interesante, el reflujo del Buñuel de México.
En una grabación en Frontera abierta sobre Melilla, que se hizo estando yo en Getxo, participó González Ferrín, un antropólogo  innovador, heterodxo, muy interesante, de pensamiento propio (tan inusual), que dijo que el Diálogo entre culturas es un absurdo,  muy sencillo: las culturas no dialogan, solo lo hacen las personas,  es mucho más difícil y hay que pensar, que juntar palabras que suenen bien y tú quedes mejor.
Ocurre una cosa, que las opiniones corales, criterios colectivos, consensos normativos,  convicciones orgánicas con el calor de la cohesión y confort suele servir para hacer más planos a sus cómodos adalides.
Si el Diálogo entre culturas no pasa de ser un catecismo de buenos propósitos, pero más vacua estupidez  aún es la Alianza de civilizaciones (¿qué podría significar? antes de ¿cómo?),  la fraseología  salida de la chistera  del  político/burócrata porfesional  y estadista  transparente Rodríguez Zapatero. Crear un sintagma, lema, divisa perfectamente estultos no compromete, y pueden venderse, aunque al parecer muy mal, No es que progrese mucho, adivinan su estupidez.
Este intrépido ideólogo fue aconsejado a irse antes de que hundiera España, por la acción combinada de Obama, Merkel y Xi Jimping. Una ametralladora de decir solennes banalidades, ayudada de su crasa incultura,  muchas inolvidales y editadas. Zapatero ahora bolivariano y activista pollo sin cabeza del Grupo de Puebla, omitido de toda universidad, tribuna, foro, think tank, prensa norteamericanas y europeas, podría hacer mucho en los mundos izquierdistas (de suyo tan proféticos) de Hispanoamerica en relación al POLISARIO (vuelto a reconocer por sus amigos), si alguien realmente le tomara en serio.

jueves, noviembre 24, 2022

Agur, agur en la farmacia. En Bilbao no decíamos adiós

                                   

La única palabra vasca incorporado al vocabulario bilbaíno de forma mayoritaria era el "agur" (adiós), y mucho  menos "gero arte" (hasta luego), no había "hola"  ni "qué tal" usado en vascuence, que aparecieron mucho después (Transición). Da igual, la gente se seguirá inventando las cosas, conforme a sencillos esquemas monistas que todo lo expliquen. En casa siempre se decía agur. El agur era el que salía. 

Una amiga vasca comentaba recién  que ahora solo nos vemos en las farmacias en lugar de los bares, yo lo compatibilizo.

 A resultas del derrame sinovial que tuve cuando cojeaba más de mi rótula accidentada, me dijeron que tomara colágeno, que ahora lo leo en todos lados.

En mi farmacia hay que pedirlo, el otro día una me sacó de quicio.

-La tiene en polvo, - consultando el ordenador- no hay las pastillas que quiere usted. Aquí veo que solo hay en polvo.

- Además no están en la pantalla donde mira -le digo- sino en aquellos estantes de allí -que le señalo y me voy.

Hoy estaba la estilizada y simpática vasca consorte, la del vasco de Luzaro, nombre ficticio en la Guipuzcoa porfunda, y que Dios les coja confesados.

Me voy y me dice Agur, tardo en reaccionar y yo también agur, hubiera seguido con mis pesquisas, qué hará el de Luzaro, como se habra aclimatado, si le hace bacalao al pil pil,  pero no ha habido oportunidad. Conociéndoles tan bien, no debería dar para nada el asunto, además del paralelismo conmigo, tiene algo de singular. Me chifla lo raro y extraño. Aunque Bilbao no deja de ser una capital, yo hubiera tenido esa ventaja, pero en realidad era otro del Goiherri guipuzcoano. Ni siquiera en tantas décadas he aprendido hablar un español castellano neutro, que no se sepa de donde eres.

miércoles, noviembre 23, 2022

Desde Chicago, víspera del Día de Acción de Gracias, hinchas de España

No sé de donde se han sacado las camisetas, y supongo que las habrán estrenado con mucha gozadera.
 
Mi nieto con su tío, todos para la celebración del Día de Acción de Gracias en Chicago, el gran día de la Nación Cívica y de su ciudadanía, que no lo es navidad para todos; algo que para muchos es dificil de comprender al menos en España, con la memez aldeana y baturra de auténticos e impresionantes nacionalismos, todos de propensión étnica,  y algunos de latencias etnicistas yugoslavas. 
Haciendo del folclore un montículo de ontología teológica. 
Pocos efectivos, esta vez pareciera que hemos sido diezmados y llevados al borde  del exterminio, que aunque lo fuera, no siendo del todo así, es tanta la poesía en la derrota... que nunca pierdes.
Y es aqui, imposible la emoción elegíaca,  la dramaturgía épica  ni la embriaguez ditirámbica, cuando nos ponemos líricos a la luz de las farolas

martes, noviembre 22, 2022

El Día: Paralelismos arqueológios: guanche/vascuence (hoy solo en digital)


José María Lizundia

Alicia García García y Antonio Tejera Gaspar nos dan cuenta (Bereberes contra Roma) de cómo en algunos yacimientos canarios se descubrieron entre inscripciones netamente bereberes (tifinagh-amazigh) otras que no lo eran, sino signos de origen latino, lo que llevará a investigadores hasta el rey Juba II de Mauritania, inserto en el Imperio romano, y al siglo I de nuestra era.

Un innegable paralelismo presenta la mano de bronce de Irulegi (próxima a Pamplona), recién descubierta: temporal primero, siglo I también, aunque a.C., y que en un conjunto de cuatro líneas de la lámina de Irulegi tres resultan indescifrables, por lo que se da también el radical contraste con las demás. La palabra que 

El paralelismo arqueológico guanche/vascuence

 Alicia García García y  Antonio Tejera Gaspar nos dan cuenta (Bereberes contra Roma) de cómo en algunos yacimientos canarios se descubrieron entre inscripciones netamente bereberes  (tifinagh-amazigh) otras que no lo eran, sino signos de origen latino, lo que llevará  a investigadores hasta el rey Juba II de Mauritania, inserto en el Imperio romano, y al siglo I de nuestra era.

Un innegable paralelismo presenta la mano de bronce de Irulegi (próxima a Pamplona), recién descubierta:  temporal primero, siglo I también, aunque a.C., y que en un conjunto de cuatro líneas de la lámina de Irulegi tres resultan indescifrables, por lo que se da también el radical  contraste con las demás. La palabra que se reconoce es Sorioneku, identificable desde el mismo euskera batua (el unificado por académicos de los años 60 pasados, y normativo). Casi dice Zorionak (felicidades).  Las tres siguientes líneas son completamente indescifrables constituyendo  un  auténtico enigma.  El descubrimiento de Irulegi ha llenado de entusiasmo a un montón de gente, empezando por algunos científicos  (entusiastas asilvestrados), aunque simplemente  deje entrever un futuro  totalmente aleatorio, pero deseado promisorio por los  vascos ontológicos, algún catalán de guardia y feligresía de  credo abertzale/nacionalista. Para los que el poder del mito es la clave de bóveda de ese imaginario de extrema singularidad. Otros lo han recibido con escepticismo. El cuerpo sígnico es el iberismo.

 Lo que ha impulsado a algunos  científicos a señalar que los  vascos no eran ágrafos y analfabetos como se daba por hecho, y añadir que demuestra la presencia inmemorial del euskera en Navarra, de ser su idioma verdadero y único. Pues con una sola palabra interpretada: ni paleoiberismo, ni celtiberismo, sino grupo vascónico.

Jon Juaristi anunció hace unos años que no convenía seguir manteniendo el origen de los vascos  en el protoiberismo, el líbico bereber o con cuna en el Cáucaso, sino que convendría fijarse mucho más en los grupos aquitanos  (la Gascuña vecina: ¡gascones!) mal latinizados.  Este hallazgo ha puesto de manifiesto otras cosas, como es lo que ya se viene reconociendo por los enormes restos materiales, que los romanos llegaron a la costa vasca, que  no solo no les resistieron, sino que siempre se sometieron.  De Irulegi -demostrado- huyeron por la guerra entre los rivales  romanos,  Sertorio y Pompeyo, que los reclutaban. El idioma de los vascones, sería de los navarros y gascones, pero no de guipuzcoanos y vizcaínos  (caristios, autrigones...) era iberismo común y carecían de cuerpo lingüístico propio, que la sola palabra sin contexto, ni código de pertenencia, sorioneku viene a desautorizar y redimir. El paralelismo guanche/ vascuence puede completarse, como algunos científicos apuntan,  con que sorioneku venga del latín: sors/sortis (suerte).

domingo, noviembre 20, 2022

Washington DC: Dos generaciones de Lizundia en arrebato místico

El padre en el 2010 (si fue entonces el Mundial que ganó España que creo que sí) cursaba el master de Relaciones Internacionales en la Universidad de Georgetown y se fueron a celebrar el triunfo -siempre mayor si fuera de casa- a Dupont Circle (plaza tan encantadora como toda la zona,  y con Fer y Rosita un año después). Como son norteamericanos e hispanos (el niño solo habla español, aunque a escondidas y con compañeros inglés, parece) supongo que el padre olvidando su reciente tropiezo con la policia de Ecuador, habrá estado con ellos y los salvadoreños, mayoría hispana de la ciudad, y las profes de la guardería hispana. Y nuestra Mariana ecuatoriana, aunque yo obviamente no he visto nada.
 Soy suficientemente frívolo y mundano como para desdeñar todo misticismo, empezando por el futbolín. 

sábado, noviembre 19, 2022

Foto-solapa de mi último libro sobre Marruecos y España, con paisaje vasco

                        

En breve saldrá mi último libro -esta es la foto de la solapa, en Plencia hará un mes- versa sobre aspectos muy concretos de la relaciones de España, gestores y mandamases de instituciones culturales españolas, con  Marruecos. Hechos que nos ocurrieron a cuenta de la colección de Ensayos Saharianos. Y también hay una crítica al Manifiesto de 250 intelectuales  españoles y marroquíes, (que parecen querer incorporarlo a la ciencia política, conceptualizándolo: sustantivo y adjetivo con "diplomacia paralela", con esa facilidad sintáctica)  cuando la gran crisis entre los dos paises del año pasado. 

Relacionamos a los intelectuales/periodistas españoles (no las "redes", "los medios", "periodismo") frente a Marruecos y a favor y mucha comprensión con el Frente Polisario. Que tampoco se dice para que todo fluya en "paralelo". Puede gustar mucho Marruecos, su gente, gastronomía, paisaje, literatura, y no soportar al régimen marroquí

Muy pocas veces, por no decir nunca, el sistema político marroquí es referido con denominaciones que no resulten ominosas: monarquía medieval, autocracia, dinastía feudal, dictadura... Es imposible oír sistema constitucional, régimen parlamentario (lo defectuoso que se quiera), pluralismo político, partitocracia. Y no creo que el vínculo personal con Marruecos mejore esto; se puede valorar muy alto a los marroquíes, el paisaje, la gastronomía, el idioma, usos y costumbres, perocosa muy distinta es la idea que tengan esos mismos españoles de su régimen político, al que no es nada ajeno el Polisario.

Se olvidan los españoles de que ese Marruecos institucional es el de su cultura, tradiciones, historia y aceptado.

Algo de mi libro en rojo y cursiva. Los españoles no son abstracciones cómodas: redes, medios y demás palabrería. No lo diluyamos todo antes de comenzar. Dos capítulos seguidos, el XV de los españoles ¿por qué esas paradojas?

XIV. Unas notas críticas sobre el manifiesto de los 250 intelectuales a cuenta de la crisis de Ghali y Ceuta.................. 59

XV. El silencio sepulcral sobre la reintegración del Sahara a Marruecos.......................................................... 63



viernes, noviembre 18, 2022

Amigos vascos se chotean de la mano de Irulegi


 Me mandan esta mano, prueba de que circula la alteración. Hay declaraciones de científicos  de total escepticismo junto a otras  de ebullición mitologizante y/o de religiosidad como es capaz de alcanzar el nacionalismo étnico y más en feudos que fueron hasta anteayer de acendrado catolicismo.

jueves, noviembre 17, 2022

Descubrimiento de "La mano de Irulegi" y el idioma vasco

 El descubrimiento cerca de Pamplona de la mano de Irulegi ha llenado de enstusiasmo a un montón de gente; empezando por algunos científicos (apasionados, emotivos, entusiastas: pues sí), porque simplemente  promete un futuro aunque totalemente indeterminado, deseado promisorio,  a los nacionalistas vascos, algún catalán de guardia y a la feligresía de esa adscripción o simpatía.

Cuatro lineas inscritas en bronce co  una sola palabra  descifrada, da pie para llegar a decir que se puede leer desde el actual euskera (el euskera batua unificado por académicos  hace 60 años),  con las tres líneas siguientes completamente indescifrables. La mano en bronce es tan solo del siglo1º antes de Cristo. Ibarretxe, Arzallus y peña se les llenaba la boca llamándose  pueblo septimilenario.

                                 

Lo que impulsa a los científicos, en trance gozoso, a señalar que los  vascos no eran ágrafos y analfabetos como se daba por hecho, y añaden que demuestra la presencia inmemorial del euskera en Navarra, de ser su idioma verdadero, único, sacro. Por  una sola palabra, ni iberismos, ni paleoiberismo, ni celtiberismo, sino grupo vascónico- 

Jon Juaristi anunció hace unos años que no convenía seguir manteniendo el origen de los vascos  en el viejo iberismo, el líbico bereber o con cuna en el Cáucaso, sino que convendría fijarse mucho más en los grupos aquitanos  (la Gascuña vecina: gascones) mal latinizados.  Este hallazgo ha puesto de manifiesto otras cosas, como es, que ya se viene reconociendo, por los enormes rastros/ restos materiales, que los romanos llegaron a la costa vasca, que los vascos no solo no les resistieron, sino que siempre se sometieron.  En Irulegi,  huyeron por la guerra entre los generales  romanos  Sertorio y Pompeyo que los reclutaban. Que el idioma de los vascones, que eran los navarros, pero no guipuzcoanos y vizcainos  (caristios, autrigones...) era paleoiberismo, iberismo y carecía de sustantividad propia científica, que la sola palabra sin contexto, ni código de pertenencia, sorioneku (casi casi zorionak/felicidades), viene a desautorizar y redimir.  Los solo  científicos dicen que oscurece más el panorama. Los otros han vuelto al Arrano Beltza y a la ebriedad de la mitología y el hambre ideológico monista religioso.  

miércoles, noviembre 16, 2022

Tras más de 8 años con columna semanal uno espera ser ultimado

Monique la camarera saca las fotos con una solo mano y yo le insto a que ponga un poco de gusto (decía mi padre o mi madre,  o ninguno de los dos) y deje la botella de la otra en la mesa y utilice las dos. He propalado que todo el mundo está por nuestras fotos. Monique no me  ha debido de creer.
Últimamente  en dos ocasiones me habían sacado en papel pero no en digital. Una era muy razonable, porque hace unas semanas estando en Bilbao escribí sobre Nico Willimas  por algo que había declarado (el motivo oportunista del texto). Es un jugador del Athletic de Bilbao, negro como su hermano, que poco antes ni sabía de él. El periódico no lo sacaron en digital, yo no lo habría sacado, menos en papel. Hubo otra vez, reciente  que ocurrió lo mismo, pensé que ya me habían empezado a enviar mensajes de que se acababa el oxígeno, empezara a despresurizarme y salir a  la supeficie.
Pues la última columna que la emprendo  contra la ministra pasarela Yolanda Díaz, poniendo a Schiller por testigo, que sale tambien en digital, vuelve a sacar puestos altos de leído, tras los profesionales, como casi siempre, pero colgada en Facebook pasan mucha horas para que uno ponga que le gusta.  Acuden en mi ayuda mi hijo y XY, pobre, habran pensado.Sin embargo en los contadores de mi blog va muy bien  para como suelen ir las columnas (de mal). 
Cuanto más festivo, banal y mundano aparezca lo que cuelgo más me entran incluso me ponen likes. Mi verdadera personalidad, debe ser patente. No será por no promocionarla.

martes, noviembre 15, 2022

Los contenidos y formas de Yolanda Díaz: restan

Friedrich Schiller reforzó  su canon estético  a cuenta del vestido: que el cuerpo esté libre y libre el vestido, asentando la  belleza en la libertad de su aparición. He escrito varios artículos sobre Yolanda Diaz y siempre he empezado (y  terminado) por la ropa y su pelo sedoso, mecido cuidadosamente. Columnistas que leo, también lo hacen, tampoco parecen poder sustraerse a las poderosas ondulaciones y flamear de cabellera y vestidos, armonioso oleaje que expresa la libertad de ambos en su manifestación (tan estudiada).  Y me pregunto ¿cuáles podrán ser los ideales y deseos más profundos que desate su inconsciente con ese culto acerbo a la exposición y el lujo? O soy un comprimido a machista (ese gran resumen moral de este siglo de Pericles) o realmente resulta lo más significativo de ella y más claves de interpretación ofrece, además de desvelar personalidad, capacidad y formación. Resulta evidente encontrar la exacta correlación entre el esplendor esteticista/esteticien de ella, todos los días, de revistas como Vogue (que rinden a las ministras socialistas), y los contenidos que sus discursos y pensamientos ensartan. Quedarían contrastadas sus formas (cuerpo/melena, vestido, apariencia) con los contenidos también  voladizos y aerostáticos como globos, pero que de tan farragosos y ñoños  extreman su simplicidad. El no tener nunca nada importante que decir, como los vacuos sindicalistas, le hace a ella también exagerar la retórica y verbosidad, y envuelta en soliloquios y logomaquias, crear contenidos ininteligibles, frases inconexas,  adolescentes y  “chulísimas” (de ministra adolescente, pija y limitada),  ausencia de ideas y razonamientos del santo evangelio de Sumar  (piedras y lentejas), y desenfadada cursilería.

No hay que preguntar a Google por nuestra ministra pasarela ya que  una vez comenzado este artículo le oigo decir, refutando a su patrocinador macho alfa (ay, la sumisión de género, qué estricta),  Iglesias, que a ella le hubiera designado  él, sino los medios de comunicación.  ¿Cómo se puede ser designada vicepresidenta por los medios de comunicación? Lo dice porque los medios la señalan como la más popular. Pues ya está, deducido queda. ¿Desde cuándo los medios son instituciones incardinadas constitucionalmente a  procedimientos políticos de designación ? Ignara, inculta, torpísima (comunismo=libertad, aseveró) ¿y las legiones de asesores gubernamentales?  Casi seguido, nuestra ministra cosmética-textil repetirá que se  va a “dejar la piel” en hacer lo que tiene que hacer.  No suponían que la vida adulta  compendiara responsabilidad y  resultados. El periodista Vicente Vallés  pone cortes de Belarra, Iglesias, Montero y Yolanda que como cotorras repiten que se van a “dejar la piel”. ¡Qué emotivos y tiernos ante el  trabajo! Ha sido un choque para esta tropa de marginales, exigirles como adultos; pues nada: ministros.

domingo, noviembre 13, 2022

Crítica del traductor/ensayista Ángel Repáraz a mi libro De Bilbao a Bilbao, 40 años después

Cuarenta años no son tanto para un corazón obstinado. José María Lizundia testimonia sobre una cierta diáspora bilbaína

Ángel Repáraz  (germanista, traductor, ensayista e ingeniero industrial)      Suplemento El Perseguidor de Diario de Avisos

 1

El Bilbao actual, el que puede tachar o centrifugar a quien se mueva imprudentemente en la sesión de fotografías, tiene un nacimiento histórico que cabe datar con alguna precisión;

efectivamente la abolición de los fueros tras la última carlistada del XIX convierte en pocos decenios a las Encartaciones en una enorme cuenca minera. Así que se implanta un capitalismo industrial de los duros y un liberalismo algo clerical, pero nada tímido con el dinero, con ferrocarriles (mineros y de pasajeros), explotaciones extensivas - a la puerta de la villa alguna - y fábricas de dimensión hasta entonces desconocida en la margen izquierda de la ría. Víctor Chávarri y los demás impulsan la siderurgia y los bancos; Bilbao está entrando en su modernidad y durante el último cuarto del XIX la ciudad cuadruplica su población. Sobre todo con inmigrantes empobrecidos, los que serán bautizados por el nacionalismo neonato como maketos. Y que serán tratados convenientemente por capataces no muy humanizados – y aborígenes, señala Unamuno -; algo que, había quien pensaba, tenían bien merecido quienes amenazaban la soñarrera idílica del preindustrialismo. Bilbao significa ya las fortunas y las mansiones del Ensanche y unas clases medias y menos que medias asustadas. En 1886 funciona ya en Bilbao la primera asociación socialista, y de 1890 es la primera huelga general de mineros en Vizcaya, con un apoyo enorme por parte obrera y un resultado atroz en vidas. Casualidadades de la vida: justo entonces, en 1893 y en el txakolí Larzábal de Archanda, desciende el Paráclito hasta la cabeza de Sabino Arana, que en su discurso programático embute mitología y ‘derechos históricos’. El ser aristotélico, como sabe cualquiera, se dice de muchas maneras; el ser de Bilbao también. Desde como tarde las últimas décadas del XIX aquel estado de cosas y sus muy perceptibles consecuencias han sido analizados y denunciados por una extensa nómina de heterodoxias, buenos poetas incluidos; por Unamuno e Indalecio Prieto, por G. Aresti, Blas de Otero, Javier de Bengoechea ¡y hasta por la poesía tentativa y agostada de Javier Echevarrieta! (El protomártir del grupo armado fue también el

protoasesino, nos recuerda con otros términos el autor). De toda esa tradición puede uno echar mano para testar que han sido muchos los motivos para salir de allí de estampida y con la determinación de no volver, o para desearlo. Entre los más recientes, Lizundia.

2 “… en agosto de 2001 rompí, decidí desde el pueblo donde había veraneado siempre [...] que no volvería nunca más.” De esa violenta impugnación de las marcas de una existencia anterior   hay interesantes precedentes en la literatura, desde luego, la de Stendhal con Grenoble es conocida y definitiva, o la de Galdós. De hecho, Lizundia ha vuelto; seamos comprensivos con estos incumplimientos invocando al bueno de Pere Quart, que asimismo volvió y asimismo quebrantó su propia su palabra (él regresó “rejuvenecido por el asco”). Pero al poco de uno de sus regresos el azar intervino en la forma de una caída en la Alhóndiga de Bilbao, y el resultado se llamó fractura rotulina. El choque con ciertas estructuras del poder médico fue un plus para su rabia acumulada; después de todo Lizundia tiene formación jurídica. Su librito es por todo ello denso e inamovible en el rechazo y elíptico en su modusdicendi; sus 23 miniensayos o viñetas no hacen todavía unas memorias, aunque las miradas hacia atrás de esos cuarenta años darían de sobra para ello. Y bien, si los veinte años del tango no son nada, el doble tampoco tendría por qué serlo cuando se ha logrado sustraerse al gran atractor.

3 No creo que, como apunta alguna recensión, sea la de Lizundia una “mirada melancólica”; pienso más bien en la furiosa decisión del que ha visto que, por causas convergentes, el ambiente allí se le había puesto irrespirable. Un extraño, pero tampoco tan próximo al Mersault de Camus porque aquí hay ironía, excelente conocimiento de realidades y hasta una militancia antigua que dio para algún susto. El problema es ese regreso, los costes de ese volver al ámbito del nacionalismo, que, como ha sido observado ya más de una vez, funcionalmente es una religión, y aquí no valen diálogos. Han sido demasiados años de ‘comprensión’ más o menos abierta con ETA – una grande, sangrienta cuadrilla. Arzallus soñaba despierto con una Euskadi entre el Adur y el Ebro, como si el régimen competencial en vigor, la Hacienda autónoma y el resto fueran modos sutiles de opresión. Y a no olvidar sus consideraciones sobre la división funcional del trabajo entequienes sacudían el árbol y quienes recogían las nueces que iban cayendo, un postulado de epistemología arbórea que, machihembrado con el conspicuo ‘lo mío para mí y lo tuyo a medias’, han enriquecido sin ninguna duda las formas discursivas de la política vasca. No extraña que gentes así estén construyendo “cada vez más, una Euskadi monoteísta”.

“Soy un bilbaíno consecuentemente anti-bilbaíno”, otra áspera confesión de quien tiene conciencia de ser un intruso en su lugar de origen, “incluso como abogado”. Los acólitos han hecho bien su trabajo: allí caben los justos y pocos más: los justos de la axiología jelkide de hoy y de siempre, entiéndase. Ibarretxe se reclamó de esos 7.000 u 8.000 años de historia vasca que, parece, no se han resuelto en un Estado nacional. El ius primi occupantis de los trogloditas como argumento; la pregunta es cómo vivir con alguna clarividencia en una comunidad cuyo titular decía cosas así. En abril de 1890, todavía en Bilbao, Unamuno escribe a un amigo: “Aquí reina el egoísmo sin tasa, y una atmósfera que quita todo aliento al espíritu.” Cuarenta años o más después de la fuga Lizundia pone coordenadas esféricas a los reencuentros decepcionantes aludiendo a Cioran, V. Grossman, Hobsbawm, Rorty, Deleuze, etc.: un mapa privado que es también seguramente el de una generación que se está yendo. Aunque él no es del todo un outsider aunque afirme tal: tenía todos los apellidos canónicos precisos para ser admitido en la Tabla Redonda del exclusivismo. Claro que, lo dijo Recalde, los nacionalistas “pretenden convertir las referencias históricas que ellos se han inventado, que no

existen, en los fundamentos de lo vasco.” La buena noticia es que también aquí se detecta al ‘vasco discrepante’ (Caro Baroja), que puede especificarse probablemente sin violencia como ‘bilbaíno discrepante’.

Lizundia ha confeccionado reactivamente una enmienda a la totalidad de una ordenación social (“esa sociedad vasca anormal”) que se encuentra en manos de quienes sabemos; las tres formaciones nacionalistas, por cierto, proceden de Sabino. No le duelen prendas: “… pasé de trasterrado a renegado y de antivasco a exvasco, que es como me gusta calificarme...”. Quizá ha sido demasiada la energía interna invertida con todos esos class enemies (así los llama) que ha ido coleccionando. Pero el humor es bueno, de modo que sigue siendo accionista de DEIA; en tiempos hasta puso en pie una ‘Asociación de Abogados de Tenerife por la libertad de Euskadi y contra el Plan Ibarretxe’. “Está todo como lo dejé”, constata en una de sus últimas epifanías. Lo mismo pero distinto; Heráclito de Bilbao, nuestro exvasco se lleva bien con los vascos dispersos por el amplio mundo. Quizá este ensayo nos exhorta a redefinir los motivos reales de nuestras diversas diásporas, que en modo alguno se limitan a las de quienes administran los oropeles de la política resistente. Para emplear un título de Handke (y de Chandler), un autor que Lizundia cita, este es un largo adiós, voluntarista y contumaz. Sobre los costes internos guardemos silencio. ¿Pero y si la inadaptación, como sugiere el autor, actuara como “un kit de mera supervivencia”? Ah y en Bilbao, no hay que decirlo, “sigue

lloviendo.”

Lizundia, José María, De Bilbao a Bilbao, cuarenta años

después. Granada: Alhulia, 2021.

Madrid, 15 de agosto de 2022

viernes, noviembre 11, 2022

Hoy de vasco, exaltación vasquista (no carcelaria), en la farmacia

Es muy guapa, estlizada y simpática, trabaja en la farmacia. No llevaba la tarjeta sanitaria y hace que aventure ¿habría solución? Me pide el nombre y como casi siempre tengo que deletrear los apellidos, porque resultan extraños, lo que determinó desde hace muchos años, y lo hago ahora, dar directamente el  DNI. Ninguno de mis dos primeros apellidos es como el quinto (anótese el nacionalismo familiar por el apellidaje y su conocimiento) que es Berriozabalgoitia, pues  no obstante.
 - ¡Es vasco! - me dice jubilosa.
-Sí, de Bilbao (desde hace décadas siempre digo de Bilbao y nunca 
vasco), ¿por...?
- Mi novio tabien es vasco- otra canaria que puede desangrar a cualquier vascongado.
- ¿De dónde? -inquiero
El Txindoki, el gran monte guipuzcoano
-De Luzaro -no es el nombre, pero al ser un pueblo muy pequeño,  usaremos Luzaro,  un  pueblo vasco  de ficción inventado por Pío Baroja
- Eso es la Guipuzcoa profunda -añado-, vascos medulares ¿Como se llama y apellida -Nombre vasco, apellido vasco y le digo-
auténtico, racial como una cantaora, bueno, es un chiste.
- Sí, la familia habla todo en euskera, vamos todos los veranos.
-¿Qué tal con ellos?
-Estupendamente con todos, mi novio lleva 8 años aquí y vamos de vacaciones- 
La hablo de Tolosa, aledaña, San Sebastian, donde vive el mejor amigo del novio, me presento como un vascongado conocedor del país, y le cuento como estuve hace unos meses en Bayona, San Juan de Luz, Biarritz y me cita Fuenterrabia. Cuando le nombro el monte Txindoki, el totem de aquella zona siente las raíces vascas de su novio de 8 años  y el Txindoki con la cumbre nevada le ilumina la cara
- Claro, tu novio habrá estado en la cárcel, siendo de Luzaro... Con ese emplazamiento topografico en el Goiherri guipuzcano, ahí no se libra ni dios.
- No ha estado en la carcel, el no es de aquella época de abertzales
- Pero sus amigos sí -le acoto-, seguro. Los de Luzaro acumularán 40 años de carcel cumplidos y 50 más si los hubieran  pillado en todas.
- Solo alguno lejano, mi novio es un bicho raro, deportista, ni fuma ni bebe, ni es de cuadrilla
-Osea que realmente  le han echado, cómo se puede ser, perdona, tan  subvasco. Yo al menos he sido y soy ex vasco
- Pues hasta los 18 años hablaba fatal español, decía muy mal tal palabra (me lo dice) y cual  también mal.
- Si quieres te doy el teléfono para que me encargues el colágeno.
-No, voy todos los días a la gasolinera por el periódico y ya vendré yo. Otra canaria de culto, pobre, enamorada de vasco, noble como un pastor alsaciano, siempre jadeante... a esas edades.

jueves, noviembre 10, 2022

Al final soy escritor porque no hago otra cosa, sólo después de librarme de haberlo sido

Mi hijo con mi nieto en Washington votando en sus primeras elecciones como ciudadano norteamericano. Como todo Washington solo se vota demócrata,  no hay ni que preguntar, amen de que fueron activistas de Obama.

Todo el mundo se colapsa por ser escritor, como pasaba a kamikazes, miembros de las juventudes hitlerianas,  comunistas, jesuitas, guardianes de la revolución...con ansiedad, desespero y frustración; a quien no le falta un nobel le falta un Planeta, a otro al menos tener su superventas o en su defecto encendidas  criticas apologéticas, siempre reconocimiento.

Una de las profesiones mas normativistas por la interiorización de  preceptos inviolables es la de  escritor, toda  la vida consumiendo cultura  con apremiantes demandas de autoexigencia monacal. El dia, la semana segmentada en conciertos, exposiciones, presentaciones, homenajes, cines, teatros, conferencias, revistas, contactos, lo que les impulsa a ser mas perfectos y desenvueltos, más valiosos, a modo de cervantinos cervatillos.

Yo solo escribo lo que necesito escribir, sin parangones, referencias, objetivos, así no se puede fallar, porque ocurre que lo que hago me sale como me es dado. Y justo ahi se acaba todo. Sería un escritor, aparte de sin lectores, interiorista y circunstancial, luego en ningún caso un escritor genérico y sustantivo, computable y orgánico. Yo siempre, en casi todo, he sido un intruso, aunque sea escritor solo de lo que escribo y quiero, sin sentido, estrategia ni camino por lo que no alcanzo a quedar investido por el concepto. Uff...

miércoles, noviembre 09, 2022

Hemos regresado a la guarida de níngún lobo, al final tenemos varias, que ya hubiera gustado

De nuevo recomponiendo la vida en Tenerife, que en mi caso prácticamente se reduce, celebradas desde hace varios lustros, a estas reuniones del lunes y que se habla de ampliarlas a los viernes cuando viene mi hermano de El Hierro, donde da  clases de enseñanza media,  de cualquier cosa. Nuestras dos profesoras de Derecho con periodismo dan asignaturas de más enjundia, gravedad, presión y temperatura.
Por fin he terminado la revision de mi libro inminente, 80 páginas logradas con muchos descansos en blanco (nieve del Montblanc). Será un libro, por lo que me llega (a mí de mí), no celebrado en mis pequeños micromundos, incluso traspapelado, cosas que sí me ocurren. Resulta que hay ámbitos de plegamiento intenso, casi intrauterinos, que no creía que pudiera ser para tanto en determinados lugares. Se habla y antepone la literatura, cuando la cosa en absoluto va de ella, y se puede argumentar con razones. Incluso persuadir a alguno más suelto.  Hay ahora otros paradigmas, que a la vista están. Yo no busco a nadie ni quiero ni necesito, no es algo que persiguiese en mi vida volcada en la cotidianidad, simplemente se ha dado.

martes, noviembre 08, 2022

Mi columna de hoy en El Día


 

domingo, noviembre 06, 2022

Jamal Mechbal y yo de conexiones wifi, con la gran coincidencia


El mismo viernes que llegaron Jamal y Mina recibí para correcciones mi último libro titulado Los vetos sucesivos. ¿Postcolonialismo político español con Marruecos?
Digo coincidencia porque el libro arranca de los vetos, aunque no únicos, del libro de Jamal y primero de la colección  Ensayos Saharianos, a cargo en todos los casos de  españoles, tanto en España como en Marruecos. Se llama "Marruecos y su Sáhara occidental" . Como  he dicho siempre, por ese libro inicie la coleccion. 
Que no sea algo trascendente no implica que no sea significativo y que no tenga sentido susceptible de ser desentrañado, que hay que argumentar y establecer. Ocurrió con mi colección, y en menor medida con mis libros propios sobre el Sáhara. Luego algo habrá que decir. Por esos lugares escapan significados mucho mas amplios.
                                                    
Como no tengo nada que ver con el universo académico, sus casuísticas, renglones y casillas, canales y esclusas y los recuentos finales a modo de consagración de lo obvio deducido, en probeta, nada me impide hacer un ejercicio de análisis crítico y por suspuesto personal, no "científico" que directamente me aterran y normalmente soy incapaz de leer.
Que hable de postcolonialismo implica que razone el significado con el que lo empleo, como derivacion, epifenómeno, latencia inconsciente de aquel periodo histórico, no que aquel esté vigente, y mucho menos tengo que ver con las catequesis de  "progreso" de un supuesto anticolonialismo.
Que  tilde a ese poscolonialismo de político, lo hago para diferenciarlo y precisarlo frente a otro que pudiera ser cultural.

sábado, noviembre 05, 2022

Jamal Eddine Mechbal y Mina ya en Tenerife


Por retraso del vuelo de Malaga llegaron pasadas las 10 al aeropuerto de Los Rodeos ayer noche. Todo perfectamente. Le pedí al camarero del bar del aeropuerto que nos inmortalizara todo lo mal que pudiese y lo hizo más o menos. Uno tiene ascendente en la hostelería. Según mi nuera soy un caso paradigmático  de amistosidad con ellos.

                                 
Esta mañana he vuelto a Mercadona, y les he comprado un zumo de naranja que olvidé ayer-
A la tarde cuando llegó XY, fue a villa anexa donde se quedan y me dijo
- no les has comprado zumo de narnaja
- se me ha olvidado, pero tienen fruta
-Unos marroquíes no pueden estar sin zumos
- En realidad, lo necesitan menos, porque ya tienen los pasaportes españoles CE, osea que pueden pasar como españoles de origen marroquí, por lo  que no les ha de ser  tan acuciante.  Además tienen anchoas y aceitunas (¿o esto es de italianos?), por parte marroqui, y crosan por legado francés. Y les he dejado una botella de blanco, por si quieren probar de andaluces que también son, y cristianos, que no.
Esta foto es de XY de hace unos 8 dias cuando en Las Arenas de Getxo fuimos de shopping por tiendas de chinos.
Ayer noche le pregunté a Jamal ¿Cómo tenemos el tema Sáhara, no Argelia, si tenemos algo novedoso realmente que aportar? Lo único que vale.
 

jueves, noviembre 03, 2022

Los últimos libros de Derecho que aniquilaré

En realidad son libros de jurisprudencia, igual me queda alguno por ahí como antigualla, que indulté. Acabé con todo lo relativo a la profesión, expedientes, agendas, trajetas de visitas y demás, no tengo ningún contacto, sin pasado, conseguí librarme de él. La utopía marxista guevarista alcanzada, en parte es verdad: realmente soy el "hombre nuevo" como poco de mi barrio de Vistabella, la gasolinera y Mercadona. Los de la foto quedaron a la entrada de la villa de invitados, por mi afán de ostentar una presunción de legalidad y orden, ley, como un bonus paterfamilias, no fuera a ser tomado por lo que soy: contracultural, disidente neuronal,   heterodoxo iracundo,  periférico escapadizo, irreverente sarcástico, crítico y nada ascribible,  no ya ideales, sino  a empresas más mundanas y comunitarias.

Tengo tantos ibro que el desorden me resulta ya insoportable. No encuentro libros. Sé tambien que los libros ya no los quieren nadie. ni prisiones, ni hogares de mayores, orfelinatos, bases aéreas, ninguna municipalidad, nadie. Pero he decidido que mientras no descienda al Hades, como Persefone Koré (será más regular), seguirán conmigo.

De regreso a Tenerife desde Bilbao

Esperando anteayer el taxi en el portal de Las Arenas de Getxo,  marea alta y el agua de la ría al fondo  cabrilleaba. En realidad esto se lo estoy escribiendo a un amigo que nos gustaría muchísimo que se pasase por casa. Desde casa se puede ir al Guggenheim y al Museo de Bilbao, ahora con la ampliación de Norman Foster y en obras, sin tropezar con un solo obstáulo físico, ni uno solo, ni en el metro ni en el autobús para ver la ría. 
                           
Ni tampoco en el portal que ahora tiene una rampa que llega justo a la puerta de casa,  y que yo no tuve el año pasado cuando me repelieron  y satanizaron en el Hospital de Basurto por la pequeña doctora, de estatura borde de la camilla si levantaba la naríz, que me diagnóstico ironía y alto bordismo (muy borde), y donde no se me intervino, teniéndolo que haberlo hecho. Tuve que arrastrarme sín rótula por escaleras y felpudo central. Dos veces regresé  en silla de ruedas en avión a Tenerife. La segunda: derrame sinovial. Hablamos. En toda Las Arenas no hay un asola acera que no esté rebajada y en Bilbao igual.

martes, noviembre 01, 2022

Artículo: El hombre blanco se disuelve para contrariedad de sus cazadores

Las  patrias del librecambismo, el libre comercio y los mercados no parecían llamadas a  encabezar mutaciones simbólicas que marcaran con hondura   la irrupción de elementos nuevos y ajenos a los bastiones de poder. Un área en la que ocupa lugar preeminente el mundo anglosajón y en donde parece que el hombre blanco, no presta mucha atención  a sus  cazadores de cabelleras. Quien no suele creer en el dinamismo social, en los recursos del propio individuo, lo hace en políticas de discriminación positiva, de la que ya hay demasiada literatura sobre su absoluta inanidad y efectos perversos (empíricos) a medio plazo. La prueba: la infalible escasez y claustrofóbica opresión. No destacando porque sean un factor dinámico de creación de riqueza, la condición para su redistribución teórica. Cuando la izquierda fue dejando de comprender el capitalismo y la explotación, entrevió la nada metafísica porque le dejaban de salir todas las cuentas, concibió de la mano de Foucault buscar nuevas contradicciones y negaciones, que sustituyeran capitalismo y explotación por la proliferación de sujetos mártires pasado o presentes, que señalaran implacables al lugar del mal radical. Como ya no había mecanismos ni procesos objetivos que alcanzaran a redimir, lo que hicieron fue reclutar a todos los sectores insatisfechos, compungidos, resentidos pero fundamentalmente justicieros, dispuestos a la caza del hombre blanco.  Aun  simbolizados en piedra,  como referentes históricos para muchas generaciones, ellos demolían. Ahora estaba orientado a la diana el carcaj con las flechas de los guerreros de la justicia  sindicados con Black Lives Matter, Me Too, y los universitarios millonarios de las grandes universidades con su cultura de la cancelación.  Los mayores censores y purificadores del mundo capitalista han descubierto  a Lucifer en el hombre blanco que imponía al mal entre colonias de seres vivos, con o sin caparazón, y sin un solo mérito de atenuación. Un prisma drásticamente teológico. Sin embargo el resentimiento woke es incapaz, en su mundo segmentado entre criaturas puras e infames, de percibir la accidentalidad y contingencia, tan solo esencias puras. El blanco se va haciendo más oscuro. Destinada, por tradición, la presidencia americana al hombre blanco, Obama con su familia la alcanzó,  que representaban (la comunidad negra) el 13% de la nación. No ocurre nada parecido en Cuba, por ejemplo.

Resulta que el hombre blanco (el primer ministro inglés) no es solo indio sino de religión  hindú, el alcalde de Londres no solo es pakistaní sino que además es musulmán, Obama y familia negros, Kamala  Harris vicepresidenta de EEUU, india;  ministros conservadores noruegos contraen matrimonio gay , el hombre blanco va suplantándose de forma natural pero eficaz. Evidentemente, les están volviendo locos.