sábado, febrero 26, 2022

Un año después vuelvo a regresar a Tenerife en silla de ruedas

Debió ser porque en Getxo y Bilbao caminé más de la cuenta (unas minucias), y ahora tengo en la rodilla algunos lagos subterráneos de líquido sinovial, para aliviarme el doctor que es de Irún me pinchó y extrajo algo, duele bastante.  La rodilla  con su rótula que nunca me había dolido ahora lo hace, tengo que tener  la pierna en alto, y cercada de hielo como en Ucrania.
En facebook me he topado, cómo no, pero mucho más mitigado,
  con el medievo "de progreso", la perspectiva prescriptiva  de las rogativas,  rezos y procesiones del NO A LA GUERRA, aunque mucho más suaves que cuando la guerra de Irak. Cuando las masas se querían más masa y ansíaban carnalidad sobre el asfalto,  asidas y entrelazadas,  hermanadas  y conscientes de  que el deseo procesional y la oración hecha consigna, podían obrar milagros
 Cuanto mayor es la imbecilidad  más gruesa se  la rotula,
Parecen inspirados  en los intelectuales de izquierda más proféticos: Paulo Coelho, Eduardo Galeano y José Saramago 

Si el NO A LA GUERRA era intelectualmente muy filosófico, el NO A LA OTAN es directamente científico, habida cuenta de que ni Rusia ni Ucrania están en la OTAN
NO A LA GUERRA ¡muy bien! Por cuanto la guerra es ABSTRACTA, IMPERSONAL, FUERZA DE LA NATURALEZA y sustraída a la esfera COGNITIVA, ANALÍTICA, A HECHOS ATRAPADOS EN
RELACIONES DE CAUSALIDAD Y VOLUNTADES

MUEREN LOS JÓVENES EN LAS GUERRAS QUE PROVOCAN LOS VIEJOS, si obviamos que a partir de la II Guerra Mundial, a diferencia de la I, murió mas población civil que militar, y que los viejos vencidos son a los únicos que se cuelgan

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