Es más agradecido escribir de etnias que de cosas rechazadas por el consensus gentium, como el reggaeton, como es igual de fácil abundar, insistir, desarrollar los a priori de la opinión común, que orillarlos con desdén.
Ayer hojee mi pequeño libro del Athletic -soy un bilbaíno que es autor también del Athletic. La crítica contra la sociedad bilbaína y vasca, sobre hechos que rodearon al Athletic, me alejaron por completo de él. Por ejemplo las veces que les pidieron un minuto de silencio por los asesinatos mas execrables. Acobardados también. Memoria queréis.
Mi libro fue escrito al calor de los hechos (ganar la Copa) estando en Washington y en CDMX . Di a leer a mi hijo que se lo leyó -es muy corto- me dijo:
-Pensaba que sería una diatriba de las tuyas, pero está muy bien, ¡lo presentarás!-
XY que también lo leyó en Cabopino, me dijo que tenía un poso muy emotivo, que me gustó.
Me ha satisfecho mucho mi incursión de ayer por mi Athletic, se dan unos presupuestos muy personales (nada que ver con todo lo publicado) al abordar su triunfo y la estetización antropológica vasca con la gabarra
San Ignacio de Loyola , patrón de Guipúzcoa y Vizcaya, el vasco más universal y más zumbado. Estuve con los jesuitas doblemente.
-hice sus ejercicios espirituales de una semana (son 2) inolvidable, por fuerte, no por fervor o fe
Y visité en Roma la Iglesia del Gesú con la habitación donde murió y donde está enterrado.
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