miércoles, agosto 14, 2024

Escribir sobre literatura canaria supone no vivir a tontas en Canarias. Comida canaria

Este fotograma es de Fuengirola, por municipalidad  del asentamiento debería ser Marbella, pero seguimos con los antiguos GPS que enfocan a esta localidad, pese haber transcurrido  4 años en el nuevo asentamiento familiar. Nos tiramos más de 20 años  vivaqueando en  Mijas, ni a media montaña.
Salieron de Puerto Banús a pescar, bajo precio, más de 200 dollars, sobre quizá algún pecio, pescaron las cabrillas que se ven y tres doradas, que también se ven pero más abajo. Y se hizo cocina canaria: papas arrugás y mojo.
Estuvieron John y Tracy y niños, también residentes en Washington y amigos de ellos, y Serena que sigue siendo italiana, muy esimulante, de mucha menor peso y  gravitación estar con otros que con españoles, los más insalubres y atragantados  siguen siendo los españoles  periféricos con su españolidad  siempre a flor de piel, tan honda e incodicionada. E incombustible
Ayer di  carpetazo a mi libro sobre determinados ensayistas (y ensayos) en la literatura canaria, mientras sigo un poco las vicisitudes de mis libros bilbaínos, que a lo idiota llevo tres. El del Athletic con numerosas entradas en google. Mi dogma inocuo es tratar de aportar algo, y si algo hay son márgenes intransitidos, en realidad todos los caminos -marcados-  conducen a cada Roma. Ya que todos disponen de su Roma.
         
Tendré escritos 4 libros y parte de un 5º sobre literatura canaria, siempre defendiendo las mismas tesis, que antes no estaban.
Si esta fue una comida dominical, ayer estuvimos en Marbella
Mañana la comida anual -reanudada- con Jamal, Mina y Chaui, Eguiar y Shilpa vendrán al aperitivo, les quieren conocer .

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