miércoles, diciembre 11, 2024

El Museo de Bellas Artes de Bilbao, el gran museo woke

Esta mañana he recibido en buen papel la felicitación navideña (eso creía, pero no lo era) del Museo de Bellas Artes  de Bilbao, del que soy, como puse recién, el socio amigo nº 118. La felicitación no es navideña, es sólo por el nuevo año,  algo que nos entrelaza como humanos homínidos en la órbita del sol, con los chinos, Islas Marshall, Burkina Fasso, Liechtenstein. 
La diferencia estriba en que frente a la generalidad, universalidad  y abstracción heliocéntrica del año nuevo, la Navidad mantiene un carácter religioso para los que legítimamente quieran dársela y, absolutamente cultural, de celebración especificamente familiar para los demás, excepto sus enemigos. Como en Estado Unidos es el Día de Acción de Gracias. Esas cosas de antropología  cultural.
El Museo de Bilbao, está en  el cantón de España más católico, beato y meapilas del país, con Navarra. Más tarde  el  cantón abrazaría las religiones de sutitución laicas con más furia y a fuego real. 
Esa honda religiosidad también  está muy representada en el museo woke -no este, este es de San Francisco- que son todas las piezas de arte sacro o religioso que tiene:  Ribera, Cranach, Zurbarán, Greco y cien más,
A los museos se les compara por su  estimulo a la espiritualidad, el recogimiento, la introspección a las catedrales e iglesias. Cuando cultura y espíritu  religioso vuelven una y otra vez a enroscarse 
 La diversidad  cultural implica el respeto absoluto a las grandes matrices culturales que conforman las religiones. El fracaso de Europa con la emigración se ve absoluto, paises escandinavos,  UK, Italia, y se debe la paternalismo poscolonialista de tratar al emigrante como un ser irresponsable, menor, incapaz.    El mismo paternalismo hiperprotector de los padres hoy en dia con sus hijos en las escuelas, no contrariarles, dorarles la píldora. Haremos un favor a los emigrantes a que se integren, y respeten los grandes  bienes culturales de los paises receptores, por el bien de todos y el futuro, 
¿Por qué arrasarán los Trump,  Meloni y demás?, los están poniendo ellos. Los woke solo piensan  en su superioridad y ejemplo moral, paternalista, tutorial, cuando nadie se lo ha pedido ¡más confianza en ellos!, del nuevo paterfamilias tolerante, comprensivo, muy complaciente y protector. O sea que los maketos y  charnegos   deben padecer las inmersiones lingüísticas y todas las coacciones  etnicistas, y la nueva emigración lo contrario. ¿Y si quisieran integrarse en la cultura de los derechos humanos, el pluralismo, las libertades?. Menudo neocolonialismo. Permitirles que lo puedan hacer. ¿y si les gustase la navidad y su espíritu y consumo?
Dejaré  pasar un par de semanas en el periódico, porque recién escribí sobre la arquitectura bilbaína y sacaré este artículo mejorado, y lo mandaré  al Museo woke con mi solicitud de baja. Que os den...






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