Shalom.
Te adjunto la corrección íntegra de la Línea Líquida, que podrías subtitular "y las comas gaseosas" -dicho sea ejerciendo de humorístico, si me lo permites-. Por lo demás, te diré que la elaboración literaria de los contenidos es sublime. El estilo, de un dinamismo que no da tregua ni descanso, que lleva al lector de un hecho a otro, de un lugar a otro sin soluciones de continuidad -ésta es su virtud más notable: que no hay tránsitos, que no hay indicaciones espaciales y temporales concretas, que todo acontece como en la órbita de un sueño, donde se entreveran, o se yuxtaponen, las situaciones más ajenas entre sí, pero todo ello con un nexo común, que me sugiere un pensamiento cartesiano: puedo dudar de la realidad de lo que cuenta el autor, no sé si lo ha soñado o no, si lo vio con sus ojos o no, si fue la materia de una alucinación o la más plena realidad; de todo esto puede dudar quien no te conoce y no ha compartido contigo todo eso que está en el libro; pero de lo que no se puede dudar es del "yo" que cuenta todo eso, es decir, de mi hermano Lizundia, de quien puedo afirmar lo que no puedo decir de otros: que es un escritor; y es más, un escritor sui generis, que sospecho ha creado un nuevo género literario.
También te adjunto fotos de nuestro paso por Las Palmas de Gran Canaria, donde creo que está nuestro público auténtico. Un abrazo.
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