Esta es la celebratio de la jubilación. Es muy difícil que vaya a comer, salvo que haya jolgorio y después alguna copa. Cosa que no suele pasar. Pero era un día muy especial, jubilatorio. O, salvo a casa de Rosita sobre el mar, que tan felices nos hizo esa casa durante décadas con Fer y otros variopintos.
Este lugar nos encantaba, y como yo no salgo, pero ella sí pero allí no, especulábamos sobre si quedarían los camareros mayores, enamorados de su trabajo, que atendían el restaurante, Uno quedaba que se acordaba de nosotros.
Ya en la nocturnidad se acercaron a casa Fernando y el dado en llamar mi hemano, o fake brother. Fernado venia a buscar las llaves de la casa de Getxo-las Arenas-Bilbao costa. Nuestra casa viene a ser un piso franco, por donde pasan los amigos. Vuelve el martes que es cuando nosotros llegamos. Mi hermano ya ha pedido semana santa, siempre se le ha dado muchísmo mejor recibir que dar, para que pueda seguir diciendo que le maltrato en el blogged.
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