Ya ha regresado Fer

Treinta días ha tardado  Fer en regresar del Caribe. No es lo mismo ir desde Canarias que regresar. El Alisio, que sigue las agujas del reloj en cada uno de los hemisferios atlánticos, obliga a subir al Atlántico norte para volver. Como dice mi hermano, Cristóbal Colón lo supo hacer a la primera, mientras los españoles necesitaron 60 años para aprender el régimen de corrientes y vientos del Pacífico.

Cuenta mi hermano que su padre era capaz  de navegar mirando a las estrellas y con un sextante, pues así dieron la vuelta al mundo Al  y Serena (8 años), le contesto, y así ha cruzado Fer unas cuatro veces el Atlántico… y el Canal de Panamá, mucho más señalizado.

Llama a las 11,30 de la noche  del viernes, que ya he llegado. ¿Incidencias? Un tornadito por Bermudas y el dichoso anticiclón de las  Azores.

-          A cuánto de la costa de EE.UU. habéis navegado?
-           A 90 millas
-          Tráfico marítimo?
-          Hemos visto algunos. Sabes que me bebí una botella de ron y otra de ginebra en la travesía, al atardecer…
-          Tú lo que  eres es una monjita, aunque un poco puta.
-          Pues el francés me llamaba alcohólico- debe tratarse de  un francés hugonote, valdense, cátaro o jansenista de Port Royal, o todo junto.
-          ¿Tú alcohólico?, será drogadicto, como ahora mismo,  ¿verdad?, se  te nota-
-          Hombre, lo echaba de menos.
-          Quedamos mañana.
-          No, que se va Esp. a EE.UU. El lunes, en los Reuni.

El lunes pasado quedamos con Esp, (una amiga de ella) y Rosita. Esp. ha terminado en ICADE  derecho con algo más. La conocí al de unas pocas horas de nacer. Se va  a trabajar ya a un despacho de abogados de Detroit (Michigan), y luego quiere hacerse abogada americana, lo que no debe ser nada fácil, y hacer un master, a poder ser en  UCLA.
-Sigo el mismo recorrido de E.- dice Esp. por lo académico- Iré a Washington a ver a mi protector.
-Tu protector está este fin de semana en Francia, en otra boda. En Angulema-
Esp. es una chica muy joven y guapa, arrolladora, superatractiva y  divertida a más no poder, es  una chica elegante, cosmopolita, viajera infatigable, aventurera. Se nos pone a hablar en chino inventado. Es sobrinita de verdad, no biológica.
Hizo, además de pasar veranos allí,  un curso del bachiller en EE.UU. (allí solo andaba con negras, en España con pijas), clava el acento sudista  americano y le encanta el francés, no en vano ha estudiado también en París. Pasa de España de  forma tan explícita, que me hace admirarla mucho más.
Su padre (Fer) siempre me dice: Tienes que aprender inglés. Tengo mejores cosas que hacer, le contesto.
-          No te das cuenta de que nosotros vamos  a acabar en EE.UU.- reitera
-          Mi pensión me alcanzará para cervezas, si me contengo, y nada más.
-          En California se puede vivir en caravanas, encima del mar, por 160 dólares y puedes comprarte cajas de cervezas por  20$.
-          Bueno, eso sí parece  razonable y asequible