domingo, julio 21, 2013

Chicas

Vamos a un cumpleaños, a un 50 cumpleaños que el hijo ha organizado a la madre, una fiesta sorpresa. Por una vez llegamos antes que la homenajeada. Saludo a una política, (diputada) y a un abogado. Cruzo frases,  y me sitúo con dos doctores. Estamos en la calle la Noria, en el Boulan, el que desde Los Reunidos los lunes parece que ha cerrado por la crisis. Pero ese es el día de descanso. Subimos a  cenar a la terraza. Todo el mundo dice que bonito está el TEA, menos yo. Parece una boda y yo me ubico al extremo con un doctor. Me paso toda la cena hablando, preguntando más bien, de enfermedades. Es un estudioso, me confirma que no hay especialidad inocua.
Me hallo como una persona normal, que  se desenvuelve como puede. Con el resto nos escrutamos y mantengo distancias. Con lo que me gusta hablar con extraños de noche, como es un   evento,  para mí es  como si fuera algo oficial, y actúo como alguien en posesión de rasgos sociópatas. Hay copas tras la cena y empiezan a afluir los jóvenes, Es como la floración de los cerezos del Valle del Jerte que anuncia la primavera. ¡Qué chicas! No recordaba que existía ese mundo con tanta realidad sugestiva, embriagadora. No me siento ni mayor ni joven, sino eterno. El doctor se ha ido –es muy preventivo-, es de costumbres fijas y muy ordenadas. No sé cómo resultará la vida desde esa atalaya. Solo tengo medio interlocutor ahora, pero es muy forzado. Las relaciones normales me resultan siempre muy dificultosas, por lo que me dedico al avistamiento. XY se está metiendo unos gin tónic de gran rentabilidad, porque no para de bailar, parece que le haya tocado  la lotería.
El paisaje es de notable calidad, mejor que el TEA. Hay una rubia espectacular de 1,80 m, el pelo recogido, con todo el cuello para ser besado a 360º. Las piernas son dos columnas de Bernini, que pueden ser observadas en un 90%. Al lado tiene a un tipo alto con pinta de rico, algo fondón, que a la rubia no le desagrada nada, pero él no acusa la disponibilidad. Cuando era como para proponerle ir a los servicios, ya.  Como será que aparece un inferior, de 1,65m y al pasar le hace un  tocamiento en la cintura a la rubia, que parece padecer una enfermedad medular, porque como si le tocaran a la de al lado. El de 1,65m, que parece no enterarse de nada, realiza otra pasada y hace unas rápidas contracciones de dedos en su cintura. Ahora sí, la rubia ejecuta un giro de 180º , dibuja un escorzo al descender a la altura de 1,65m y le abraza como a un primo. Para que el que tiene pinta de rico lo vea. 1.65 m se va por donde ha venido. En el mismo ángulo tengo a otra rubia que desde la cadera al pecho va al descubierto, que sabe que aunque aparentemente pase desapercibida pronto en el fluir del alcohol suscitara miradas y acciones  de deseo. Se  nota que la noche le está yendo  algo retrasada. Le falta la voluptuosidad tipo remolino y mareo de la primera rubia. Hay una morena que tiene un vestido rosa muy vaporoso, como de  romana pasada por  Chicago. Supongo que espera que se le acerque un tío con la carrera de piano en curso y  -que-le-haga-reír-, conforme al máximo  ideal femenino. Cualquiera de esos del piano, le ve bailar, y le compra flores, que es lo que a ella le gustaría. Las camareras son todas de sobresaliente y van vestidas lo justo. Todo el rato pensaba: esto debe ser Ibiza. De vez en  cuando se me acerca XY con sus gin tonic para decirme señalando los árboles “mira qué magnolios y  qué flamboyanos, qué bonito, como el día”.
Al cabo le digo a XY “vámonos a Los Reunidos a  tomarnos otra copa, son las 2.30 además” Bajamos y más mujerío, parecen las huríes del paraíso, por  lo que me entran ganas de inmolarme.
Saludamos a los del bar, y me paso a la cerveza.
-La rubia tenía dos piernas como columnas pero de cara no estaba tan buena- me dice XY
-¿Quién? ah sí- 

1 comentario:

Anónimo dijo...

1
¿Había mujeres a tutiplén?

¡Mal hermano!

Tendría que haber invitado al escritor ágrafo que además sabe tocar el piano.

2
Mañana devuelvo al TEA "CRÓNICAS DE JERUSALEN" cómic del autor canadiense Guy Delisle. Signatura: C DEL cro.

Recomendable para los pro (y los anti) EstadodeIsrael.


Salu2, EDH.