Willy Toledo entra en este blog

Pudiera ser una broma de algún enemigo mío, pero no parece. Basta entrar en el comentario del post de abajo  "Esfuerzo baldío, mañana boda" y ver que quién deja un comentario y dice llamarse Willy Toledo es muy probablemente él.  Si se copia y pega la dirección que envía aparece incluso W. Toledo (la foto de arriba) y el festival de Tinduf al que aludo en el post que contesta. El tono amable y elegante también pudiera adjudicársele, por la, parece ser, esmerada educación recibida.
El Sáhara que me interesa no es precisamente  el de estos animadores del infierno, articulado desde el glamour del cine, la sofisticación, la puesta en escena de una solidaridad pública, publicitada que muestra más (y exhibe mucho más) al que hace profesión de esa elevación moral que al pobre destinatario, que está sobre todo para ver el cine de los promotores del turismo solidario.  A mí me recuerda a la hipocresía franquista,  a las mujeres de los ministros franquistas postulantes.
Estos solidarios de la imagen, los aplausos y la fotogenia, en la página de la foto señalan que al festival de Tinduf, que se celebrará a principios de mayo, no puede asistir el otro astro de la discreción (de la mano izquierda que no sabe lo que hace la derecha) que es Javier Bardem.
En ese Sáhara de bambalinas, focos y maquillajes que patrocinan los solidarios, en su página, se dice que nuestro actor de Hollywood y las movidas de aquel mundill, de beisbol, lujo, muy estudiada informalidad donará una ambulancia a los saharauis. Esta moral, que la pagina de la foto de arriba patrocina, es idéntica a la caridad de la alta sociedad.
Pero en le caso se estos es peor aún, porque no debieran jugar con el inmenso sufrimiento de los otros, ni incitarlos, ni venirles a decir que todas sus atenciones, interés por ellos, movidas glamourosas con turbante y té, tienen un Precio (muy alto): deben seguir resistiendo. No tengo palabras para los que condicionan la vida de los demás sin arriesgar absolutamente nada. Pocas cosas me parecen peores.     
Unos tienen que resistir, no buscarse la vida como cualquier otro, para que los hijos del privilegio, la opulencia y un narcisismo extremo, los exhibicionistas, a costa de las vidas (de qué hacer con ellas) de otros, puedan pasar  un fin de semana en el desierto bajo las  estrellas como ellos, etnicismo, pintoresquismo, atrezzo, escenificación, magia… y sus películas. Un fin de  semana distinto, guay, con  atrezzo turbante.

Bendita solidaridad anglosajona, de Médicos sin Fronteras, de misioneros y monjas, de anónimos cooperantes…  
En cualquier caso a mí me interesa otro  Sáhara, no el  irreal, manipulado, glamouroso, promocional de imagen elevada, verdaderamente insólito…. 

En la foto de arriba

los mantenedores de la alta moral de resistencia y lucha de un pueblo/soldado, que tras un fin de semana distinto bajo las estrellas del desierto regresaran a Madrid, luego de un viaje de supervisión, caridad y glamour. Que concide con lo que los saharauis más necesitan: pasarela y el papel maldito de espectadores, ahora de astros morales. Toda mi admiración... Se podrían regalar plasmas, si se tratara del cine, pero faltaría el glamour, la pasarela, la obsecena exhibición de tanta buena conciencia...y el coroloario de la ejemplaridad y la pedagogía de personas de tan alta constitución moral. Faltan un finde y regalan una ambulancia, y lo cuentan en la página que me envían con esa dirección. ¡Saharauis: no les abandonéis nunca! Os necesitan como no imagináis.

 Ni el teatro convencional les produce esas emociones distintas.

Esta tarde (en torno) a las 18H, La Puerta, 95.3