Fuimos grupo ahora grupúsculo, su núcleo actual, lo mismo en Vizcaya que en Tenerife

 La vida no es que cambie mucho, simplemente se vuelve peor cuando desaparece un amigo esencial, con el que  desparece una época, su época, de la que sería  su epónimo, cuyo ejemplo (de epónimo) sería el siglo de Goethe. Pasó con Fer, ya para dos años. Hace unos años nos esperaban hasta tres mesas todos los lunes de guardar, las rellenábamos  los necesarios y contingentes, y entre estos los circunstanciales. Conocí a una armenia,  cuando lo único armenio que había conocido en el  viejo Jerusalén  fue la Iglesia armenia y en la iglesia del Santo Sepulcro, sus custodios, que parecían de data bastante  anterior a Cristo nuestro señor; di cancha a un noruego como enlatado que no valía nada y a una venezolana bastante atómica y envidiable, podía seguir, bueno y una polaca de la que  solo obtuve admoniciones, con generaciones de vozka por sus venas y  ADN consideró que había bebido mucho (cerveza y vino), campo a traves de mi hermano, su efímero tutor, que esencial y  de antigüedad consolidada, profesora ahora en la  secundaria de Fuerteventura y salir expelido de la abogacia como un globo liberado del nudo.