lunes, agosto 04, 2014

¿Una izquierda también racista?

Tenía mucha razón Yael el lunes pasado cuando decía que en este conflicto de Gaza era la primera vez en que el antisemitismo actuaba como tal, sin subterfugios o eufemismos. Los digitales hierven, se habla de holocausto, Hitler,  judíos nazis y mil barbaridades más. Ya se pasa de sionismo y Estado sionista,  que han quedado insuficientes. El sentimiento español tan furibundo los ha desbordado.  Da igual la lejanía, solo en Palestina están los judíos, arda Siria, arda Irak, Libia o Líbano y mueran todos sus niños. Los españoles salvan la pasividad del mundo islámico en el conflicto. Es psiquiátrico.
Antonio Gala que hizo militar su cursilería de fular,  bastón y dicción engalanada  en la izquierda, ya se ha hecho acreedor de una querella por racismo químicamente puro. El estado sionista se les ha quedado corto, ahora van directamente  a por Yavhé  e hijos. Como lo hacía ayer en su columna de El País Manuel Vicent.  Vicent que es todo sorna e ironía, todo él sensualismo barroco mediterráneo,  paella, naranjas, tracas y saber vivir parpadeando de tanta y reconfortante   luz blanca, lo que le ha permitido siempre eximirse de cualquier profundidad,  ayer también apuntaba directamente a   Yahve.  A ver si convocan un Concilio, o mejor no, no vuelvan a quemar iglesias. Eso mismo lo hacen unos holandeses con Mahoma y no la cuentan. Venía a decir que en el lugar donde realmente  progresan  los judíos es  en EEUU, (banca, poder mundial, lobby, verdadera patria el dinero, los Protocolos  de los Sabios  de Sion, etc) y que el estado de Israel no era más que una base (militar, no estado o patria)  de EE.UU donde reinaba la peor (no hay mucho que elegir en Él) cara de Yavhé.
Ahora sí que hemos sobrepasado la famosa  línea verde o las fronteras de  1967, o sea el mismo  Estado de Israel,  que ya se lo saltan,  para arrumbar ante el mismo núcleo  religioso,  extra político,  que gobierna Yavhé. Los anteriores, ya en Yahvé, llaman a los israelíes el pueblo israelita, para centrarse en la biblia y en el comienzo del estigma (también lo dice Vicent; no parece que tengan subconsciente).  
Quienes  repercuten todo más allá el estado de Israel y van a la esencia profunda de su aversión es la izquierda refinada y creativa, que nunca nos deslumbraron por sus ideas y capacidad crítica, sino por su lirismo ornamental.  
Así que  entra en liza  Pilar Manjón con toda  su formación cultural, intelectual y  moral de  fundamento sindical, que politiza con  voluntad de barricada toda la intimidad e intransferibilidad del propio dolor. El extravío de años lo lleva a enfatizar su ODIO por el negro Obama a la vez que QUIERE A SUS NIÑAS  DE GAZA. Esta imbecilidad es la que estilan los gañanes hare krishna.
La izquierda española que no ha dado en toda su historia un solo pensador -a cambio atesora  episodios negros de olvidar-,  enajenada de cualquier tentación por las ideas, ha centrado su ser en dar lecciones lacrimógenas  de su fibra ética. No por las ideas que no tienen, sino por  ellos mismos que son muy puros desde niños. La nueva e insufrible beatería. España eterna en sus más mínimos detalles.
Manjón es una muestra, dónde habrá más intención, más pulsión, más verdad ¿llamando negro a todo un presidente más que respetable  y  puta a su mujer, o indicándonos que QUIERE (oh, cuánto quieres, que guay)  a “sus niños” de Gaza? Porque yo quiero también  mucho a los osos polares, los caimanes, los loritos,  los mestizos, las tías buenas, los electrodomésticos…. Incluso a la gente inteligente y valiosa

2 comentarios:

José María Lizundia Zamalloa dijo...

Leo con satisfacción que el mundo de la cultura de EE.UU.(John Voigt, periódicos y alguna personalidad), a cuenta de la última machada de Pe y Bardem, ya se refieren al "ANTISEMITISMO ALARMANTE DE ESPAÑA".
No son los único sorprendidos los alemanes, también los americanos.
Y eso que no han leído a Antonio Gala ni a Manuel Vicent

Anónimo dijo...

Y luego los progresistas no se van a vivir a un pais árabe ni para atrás. Y para dar a luz eligen clínicas de los maléficos EEUU.

Antonio Gayla no duraba ni una semana en Irán o Arabia Saudí.

No tienen solución.

Sal2, EDH.