NO A LA GUERRA, DICEN
Excursus: dentro de unos ideas enviaré desde Málaga una invitación para todos
Este año se repiten los viajes al mismo lugar: Bilbao Las
Palmas y Málaga (como saben los allegados: preparativos y amigazos). The last two, my favorites places.
Iba dejar un alegato -que al final es este- contra los que claman contra la guerra de Siria por llegar, que según
estos psicóticos y enfermos solo se
inauguraría si Estados Unidos bombardease el país. Seré claro: que los ya más de 100.000 muertos y deudos los maldigan.
¡Qué persona equilibrada, moral e inteligente puede pasar por alto, ignorar, desreconocer a 100.000 muertos! No cuentan
ni ellos, ni la guerra que libran desde hace dos años, ni las armas químicas, y
que omiten dar nombre a la guerra tan cruenta, qué esperan masturbatorios,
babosos y jadeantes con los ojos
incendiados de odio y resentimientos almacenados
a lo largo de la vida, escrutando el cielo ansiosos, ver cruzarlo algún tomahawk de nacionalidad americana. El rencor
amasado, las decepciones de la vida, frustraciones, falta de esperanza, temores se confabulan
para, no dando nombre a la guerra y a los muertos, solo resplandezcan los que los americanos puedan provocar, si llegan. ¡Gañanes
infames, que los muertos os maldigan! Tienen una concepción de la vida y la
guerra objetivamente asimilable a Hitler o Stalin. De forma que no pueden dar
importancia al germen de derecho internacional que trata de regular las guerras
para limitar sus efectos más execrables, lo que no les merece ninguna
valoración. No seré tan breve. Suele corresponder esta mentalidad a
estructuras psicológicas resentidas y oscuras, que la inteligencia es incapaz
de influir como ellos se encargan de demostrar con su ramplonería, pobreza
mental y escoria moral.
Esas pasiones, humores, instintos no pueden mostrarlos en toda
su puridad en la vida social lógicamente, pero
en cuanto hay oportunidades para sublimarlas, enmascarándolas en inquietudes
humanas o sociales colectivas, se aprestan a gestionarlas así. De forma que el
odio, frustraciones, decepciones y resentimiento
que en la vida diaria conviene disimular, puede aparecer sublimados -¡cielo santo, cuanto amor a los
muertos potenciales y ninguno a los miles ya habidos!-, es decir socialmente
aceptado y justificado por las pancartas gañanes de ese nivel falto de instrucción
elemental.
Que la garrulería
antisistema a cual más analfabeto (si les preguntases por doctrinas,
sistemas, teorías, autores, historia, cultura… no sabrían escribir, los patanes-héroes
–nunca en ningún sitio- , más de una línea de cada cosa, como mucho) deliren a
su nivel cognitivo, pues bueno, vale...
escalón porcino.
Lo malo es cuando un doctor
médico, proclive a presentir el amor dulce y el agua de colonia de su madre en todos sus
congéneres inmediatos, apasquina inteligencia, como la que abre este post, en ese paredón de la libre
creatividad que es Facebook.
Aunque los toscos homínidos sean incapaces de entenderlo,
ojo con la precisión de las bombas teledirigidas, pudiera darse el caso de que
apenas produjeran muertos, las potenciales víctimas ya saben qué
objetivos se buscarían.
Siria ya lleva más muertos que Afganistán, y si lo
único que debe preocuparnos es los que pueda producir EE.UU. lo debieran
decir claramente y de una vez, que solo computan los muertos de ellos. ¡Los demás no existen! La tarea
ahora es reflexionar, para esta caterva neandertal, sobre el valor
moral de la aleatoriedad de la vida, en cuanto circunstancia entitativa, susceptible de extinción. ¿Lo entendéis?
Y la génesis de un
odio tan personal y reconcentrado, de tanta pureza por lo demás, ante la
impersonalidad abstracta de un país que irradia los mayores bienes materiales e
inmateriales culturales y las instituciones más civilizadas de todos los
tiempos. Suponiendo que los gañanes sepan
que es eso.
Quizá como propuso nuestro amigo californiano en la actualidad,
los restos de los fundadores de upyd, los "ex" debiéramos organizarnos y
combatir a los camisas pardas. Los gañanes siempre ocupan las mismas trincheras.
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