Cuando se fueron Al y su hermana Marta, vinieron por otra hermana y se quedaron en casa, se urdió un viaje a Egipto para la segunda quincena de octubre, cuando íbamos a ir a Argentina. Al final quienes han estado en Argentina y Montevideo han sido mis hijos.
En Buenos Aires mi hijo tiene amigos y queda con ellos, como si estuviera en Madrid, y así en medio mundo.
Van a expedicionar a Egipto Fer, Rosita mi cuñada y XY.
Rosita : ¿Pero cómo no vas a venir, con lo culto que eres?
Yo: yo soy culto de aquella manera, o sea por mini materias algunas.
Les reproché que no me presionaron para que fuese, que no dijeran por ejemplo si no vienes tú nosotros tampoco vamos, o algún tipo de conminación parecida, a todos se les olvidó que quisieran que fuera. Les amenacé diciendo que me iría Argentina o a otro sitio guay. no me lo creyeron
Se trata de un crucero por el Nilo: 4 días y 4 noches y otros 4 días en un hotel de 5 estrellas en el Cairo.
Jamás he tenido el más mínimo interés por Egipto. No me impresionan las pirámides hechas para atemorizar y someter al humano contrastándolo con su grandiosa orfandad y pequeñez. No me gustan los demás monumentos, y mantengo el deseo, más o menos férvido, de no verlos jamás.
Me parece del todo penoso pasar 4 días en un crucero, viendo desfilar palmerales , vegas munificentes y pirámides. Me hastiaría ver las pequeñas embarcaciones de una sola vela navegar por el río, como los vendedores tratando de abordar el barco, ni sus paradas en las orillas.
Detesto el turismo de masas y los cruceros.
El Cairo sería otra cuestíón pero las riadas de coches , la densidad poblacional todo apelmazado, compacto, viscoso, fluído me echan par a atrás.
Dos cosas me interesan, pero no suficientemente, la universidad Al Azar, que es la más importante islámica y las culturas nilóticas, de estas su nombre, me parece muy aventajado poder decirlo, da poso, suena elevado,
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