domingo, diciembre 13, 2015

De la España musulmana a Ball, dadaista y católico

He terminado la Historia de la España musulmana y me ha sabido a poco. Me ayuda mucho a controlar lo que quiero conocer del Magreb. No sé si el Sáhara dará para más, pero al menos tengo ocasión de divulgar temas moriscos y andalusíes. Y me gusta, ya por placer, Marruecos y su historia especialmente con relación a España.
Uno de los libros que apareció en uno de los aludes de libros de mi mesa (al suelo), fue el de Hugo Ball, fundador del Cabaret Voltaire de Zurich y donde surgió el movimiento dadaísta DADÁ que daría pie al surrealista. Ahí es nada. Llevaron el arte de vanguardia a su extremo extintivo, a su disolución, pero no ocurrió así, tampoco con el arte conceptual de los 60 del siglo pasado. Conocía a Hugo Ball, por lo que digo, y había visto alguna de sus poesías (se ven más que se lean) que eso hubiera sido motivo de compra me parecía insuficiente. Soy de los que se fijan mucho en la edición. Casi puedo comprar un libro por cómo está editado. Pero no, resulta que una última y pequeña parte del libro esta dedicado al jurista Carl Schmitt. Qué podría ligar a un fundador del dadaísmo con el jurista y pensador de la legalidad nazi, aunque grandísimo intelectual. Pues era el catolicismo y la revista católica Hochland
¿Acaso podía haber un dada, un nihilista, que fuera católico, no parecía razonable?
Zurich acoge sobre todo a final de la Primera Guerra Mundial, a Lenin (en las antípodas), Benjamin, Bloch, Bakunin (traducido por Ball) y a un montón de personalidades.
Ball retornó al catolicismo, y se fue finalmente al cantón de Ticino en Suiza para llevar una vida ascética y de máxima pobreza, estaba hechizado por el cristianismo bizantino.
Paul Auster, que escribió sobre él dijo que era demasiado filósofo para ser artista y demasiado artista para ser filósofo y demasiado introvertido para ser un auténtico activista. 
Magnífico comentario porque sale un Cero positivo, queda un poco Dádá además 
Gracias a este libro me embebo de Schmitt (de momento en la introducción) y de paso de la visión tan negativa, de católicos acérrimos como este y Ball, de los protestantes. Aparece el famoso y fundamental, durante la República de Weimar, partido católico Zentrum
Ball para ser un poeta no está nada mal como intelectual, y se midió con Schmitt. Lógicamente terminaron enfadados 




1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenas tardes,

estaba dando un paseo por tu blog y encontré este post, que me ha gustado mucho. Hay algo más que decir de este libro, ahora que lo has leído? Quizás tengas algún post sobre ello, pero hasta ahora no he dado con el.

Saludos desde Santiago de Chile

Bárbara
misosoafrica.wordpress.com