jueves, enero 23, 2014

Un blog notable el de Carla

Mi desafección ya es directamente a internet, me había circunscrito a pocas  digitales y twitter y a escribir (sigo teniendo algún adepto), pero hay veces que me quedo frente a la pantalla como ante los libros cuando era estudiante, como en una penitencia que te deja vacío, la  sensación de la nada. Entonces televisión, series americanas, lo que te saque de España. En twitter sigo  a algunas  actrices y a la revista HOLA.
Por otro lado también a muchos museos, sobre todo  los de ciudades que he visitado en los últimos tiempos. De Miami por ejemplo sigo todos en los que estuve como de Málaga (afecto).
Miami connection. La revista HOLA tiene varios blogs y uno de ellos de la bloguera que leo entero, no en diagonal o a salto de escalones (que es mi método habitual, salvo que el tema me atraiga mucho) sino línea a línea, Carla Goyanes. A ella y su familia los conozco por el Hola de toda la vida y no por Marbella (la ciudad de este año, sin duda), ya me hubiera gustado. Alguna de sus lectoras le cuenta que hasta leerla  encarnaba el canon de  pija, a lo que ella responde diciendo  que siempre ha sido una currante, que es lo que suelen ser los ricos. Estudió en Icade o un sitio de esos empresariales  e hizo algún master fuera, además de nacer en Londres y no en Marbella como cabía esperar de hacerlo en verano.
Esta mujer, que es muy guapa  y fina, redacta muy bien, da una sensación muy fresca, como un daikiri en Lincoln Avenue. Gracias a su blog, que se llama –atención-  Loving  Miami, puedes volver a zambullirte en aquella ciudad de tanto contraste, integración y espléndido y mal gusto. Carla saca además unas fotos magníficas, por lo que se hace  muy grato  seguirla.
Aunque va directa a lo que trata conserva intacto el lenguaje (no es jerga) pijo, que resulta muy fiestero y de shopping,  de tintineo resonante y términos algunos muy logrados. También sacaba  un post muy práctico de lo que hay que hacer para vivir en Miami. Hace una vida burguesa con muchas relaciones sociales, más bien de amistades y explica de maravilla como es esa vida (un poco más interesante que las que conozco), sobre todo la de esa franja española bien situada allí. Recién daba mucha información de la Lincoln Avenue, exactamente de cómo es su ambiente  y encima con fotos. Ella es de las que saca mucho partido a la vida apegada admirablemente al mundo de sentimientos y emociones, a las  fuentes naturales del disfrute y goce de la vida. Con el equilibrio correspondiente para que pueda darse. Este tipo de  gente de derechas suele ser auténtica, no necesita ir de nada y dárselas de algo, en absoluto.
La gente más detestable que he conocido en mi vida son los burgueses progres, solidarios y comprometidos. Puro dárselas, tribuna  de evaluación moral y afectación a raudales. Como dice la hondura popular canina canaria: ¡guárdame un cachorro!
He coincidido con pijos de alcurnia, pero nunca me relacioné con ellos, entre otras cosas porque ya se encargaban ellos de repeler. No daban tiempo. En todos los sitios son muy oligarquía peruana.
 Tradicionalmente mis caladeros  de pesca social han sido tres: progres, neuróticos y marginales, por ese orden (aunque puede ir todo junto perfectamente). Por supuesto he desertado de los tres. Con estos antecedentes es lógico que sea un arrepentido,  y deguste por fin  a gente o tipos de interés como Carla, sin prejuicios, de los que los progres han sido las Panzerdivisionen.
 Ahora que por fin estoy algo pulido. Gente: singular y solvente (moral).

3 comentarios:

Jesús M. Pérez dijo...

¡Progre, neurótico y marginal! Me has descrito perfectamente. :D

José María Lizundia Zamalloa dijo...

No es lo mismo centro izquierda moderada, racionalismo (histeroide), y centralidad para centros de poder e instituciones

José María Lizundia Zamalloa dijo...

No es lo mismo centro izquierda moderada, racionalismo (histeroide), y centralidad para centros de poder e instituciones