domingo, noviembre 10, 2013

Mi hermano, Bilbao, la Económica y La Laguna Fotos

Vino a coincidir con mi libro sobre el nacionalismo canario, cuando un amigo de la Cultura –con mayúsculas en tiempos de dominio de la sub-sub-sub-  me dijo que podría acceder  a la Real Sociedad Económica, a lo que no di  mayor importancia en aquel momento.  Después un abogado  de sesgo intelectual me hizo prácticamente el mismo comentario.  Incurso en edad  preinvernal, según la ponderación de Paul Auster,  lo recordé  y él me procuró los 6 avalistas necesarios, el primero incluido. Así acabé yo al menos dentro de  la Económica.
A mi edad es  momento de buscarse mausoleos en los que reposar, más si tienen la garantía que ofrece la Entidad: 230 años de pervivencia. Tengo otro más en proyecto  y desarrollo méritos para alcanzarlo.
El acto del jueves fue uno de los más satisfactorios de los que he asistido. Mi currículo comienza muy al final de mi cuarentena  y hasta a mí me sorprende (por sobrevenido) cuando lo remito y  veo; además es del tipo de los que a mí me gustan. Partía de flacas tentativas  suburbiales que borré por lacerantes. A muchos les pasa exactamente lo contrario, que se fijaron  prematuramente expectativas que jamás cuajarían.
La observación más pertinente y luminosa la hizo mi hermano. El mérito de la Real Sociedad Económica es tal –así lo dijo- , que se funda antes (1777) incluso de que Kant escribiera la Crítica de la Razón Pura.  Antes  de que el gran notario y constituyente de la Ilustración formalizara   el nuevo paradigma. La Económica llama la atención por su línea de lealtad absoluta, y casi pormenorizada a los valores de la Ilustración.
Mi hermano debería ser un prócer de ella. Tiene como poco época, estética y ética.
 
La vasquización de mi hermano
Mi hermano de suyo proclive a la inmersión religiosa –no hay objetos de su interés profanos- , ha investido de esa cualidad a lo vasco. Septiembre fue su Camino de Damasco y el nacionalismo vasco puede ser su Jerusalén.
Prepara bien lo de Bilbao, le digo, que tu conferencia puede atraer a gente muy conocedora. Hay mucha afición a la música.  A mí me corresponde hacer su mejor presentación.  Es evidente que la gente más interesante es de dos tipos: los abogados intelectuales y los ingenieros. ¿Alguien se imagina hablando de la vida y la muerte con filósofos y sus selvas de océanos de  palabras o con un  lírico de ojos líquidos?
Mi nuevo papel de agente de intelectuales
Detrás de mi hermano, comparecerá Jesús Pérez Triana en  la tribuna por excelencia de Bilbao. Alguien en verdad solvente. Canarios que hay que dar a conocer.  Pero mi promoción no se agota ahí, ya que pretendo que pasen también por la Económica, y ya he pensado en apoyos. En relación a mi hermano sería muy bonito para la conferencia, que  la calle San Agustín (a modo de llamamiento) de La Laguna se viera amenizada con Tanhäuser. Es lo que debe hacerse.
El orfeón La PazDistintas disertaciones. Con un sabio del judaísmo sefardí en Canarias arriba y abajo con mi pariente Zamalloa
 




1 comentario:

Anónimo dijo...

1
Huntington estaría contento con la Real Sociedad, un ejemplo de institución que se ha ido adaptando al paso del tiempo.

2
Ojala su hermano haga un remeik de su conferencia sobre Wagner. Y si los zotes del Casino no se dejan, ahora que hay manga con la Real Sociedad , ya tenemos sitio...

3
Su mujer guapa como siempre y Fran sonriente como siempre.

Salu2,
EDH