domingo, enero 13, 2013

Amor a la cultura alemana y al judaísmo (y Bonhoeffer)

Primero vinieron a  por los socialistas, y yo no dije nada,
porque no era socialista.
Luego vinieron a por los sindicalistas, y yo no dije nada,
porque no era un sindicalista.
Luego vinieron a por los judíos, y yo no dije nada,
porque no era judío.
¡Luego vinieron por mí
 Y, en ese momento, no quedaba nadie que dijera nada

Queridos y admirados progres: este poema que se atribuye a Bertol Brecht,  y así lo suponéis, lamento mucho defraudaros: no es de él, lo que  ya conocía, no así el autor,  que es Dietrich Bonhoeffer, un pastor evangélico, incansable combatiente contra el nazismo, que  terminó ejecutado por ellos en 1943.
Ya en 1938 dejó escrito

Y creo que toda la cristiandad debería orar con nosotros para que haya una “resistencia hasta la muerte”, y que se encuentre a la gente que la quiera padecer.
Dietrich Banhoeffer
 
El libro BONHOEFFER, Pastor, mártir, profeta, espía me lo trajeron de EE.UU. Está editado en Nashville (Tennessee) en un magnífico castellano. Mayor número de ventas del New York Times.
Sabía del compromiso con la libertad y la suerte de los judíos de algunos pastores protestantes y  (creo que menos) sacerdotes católicos. Bonhoeffer llegó hasta el final, cuando la inmundicia de la condición humana apestó como nunca antes lo había hecho. Unos pocos –como siempre- mostraron la posibilidad de que  la naturaleza humana fuera susceptible de redención. No creo que hubiera hecho buenas migas con Bonhoeffer, pero su historia debería enseñarse en las escuelas.
Yo llegué al judaísmo  por el Holocausto. De niño las imágenes de los cuerpos de los campos de exterminio me estremecieron de horror. Supe que caía del lado de los criminales, de la cultura cristiana occidental (las demás son en general bastante peores) o en cualquier caso  de los que miraron/miran a otro lado, igual de ominosos que  los primeros. Aunque de cristianos los nazis no tuvieran nada, ya que entroncaron con el paganismo, la mitología germánica y lo Volkisch, las SS con el ocultismo y la astrología.
Pero al judaísmo hubiera llegado igual, por mi interés por la cultura alemana.
A mí de la cultura alemana no me interesa su mitología y paganismo, sus Thor, Wotan, Odín, el Walhalla, ni sus truenos y martillos, ni sus signos solares como la cruz gamada, ni menos las voces ancestrales del Volk.
A mí de la cultura alemana me interesan Lutero y la Reforma, Sturm und Drang, el Klassizismus, la Aufklärung, el romanticismo alemán, el idealismo alemán, el pietismo, el yiddish, Prusia, Austria, el expresionismo, la Bauhaus, la Escuela de Frankfurt, el psicoanálisis, el marxismo y la II Internacional, el historicismo…
Ninguna cultura ha ofrecido tanto  en pensamiento. En el terreno de la Kultur, aunque no en civilización, haciendo el distingo francés,  reconocida sobre todo a los anglosajones y bueno, también a los franceses (la Ilustración).
No concibo la cultura alemana sin el elemento judío, lo que la distingue y le confiere profundidad y grosor, una densidad sublime gracias al judaísmo.
Por otro lado, el propio Banhoeffer y  Stauffenberg y sus compañeros militares que intentaron matar a Hitler, encarnan un concepto netamente alemán: la  aristocracia del espíritu, los judíos representan la aristocracia de la fe. Un indudable parentesco. Por amante de la cultura alemana soy projudío. La cultura alemana es el puente al judaísmo, algo que no gustará a los judíos, pero soy hijo de una época, lugar y cultura. Sin ella –o desgraciadamente sin los alemanes-no hubiéramos alcanzado la orilla del judaísmo.
 

4 comentarios:

José María Lizundia Zamalloa dijo...

Sabía que iba a conmover a Kamenev. Me ha llamado: "los porgres igual no saben que el poema no es de Bertol Brecht, pero los comunistas sí", me ha dicho. Yo a veces también distingo a los progres de la antiguia extrema izquierda.
"Pero no es Bonhoeffer sino otro y adeemás no empieza con los socialistas (primero fueron a por...)". Me he callado. Como ya bastantes hostias (y tiros)se dieron los comunistas y los socialistas alemanes durante toda la República de Weimar, cuando los comunistas del DKP tildaban a los socialdemócratas del SPD de SOCIAL FASCISTAS Y SOCIALIMPERIALISTAS, no he querido ennardecer los ánimos, no sea que reanuden las hostilidades

José María Lizundia Zamalloa dijo...

Me ha dicho que no empieza el poema primero con los socialistas sino con los comunistas, para que se entienda algo de lo que he escrito arriba

José María Lizundia Zamalloa dijo...

Mi hermano:"no sé las veces que José Sacristán ha recitado ese poema agtribuyéndoselo a Bertol Brecht".
Bertol Brecht franduleó mucho por Hollywood y EE.UU. Consiguió aunar tesis y antítesis:frivolidad y comunismo soviético real.
El intelactor José Sacristán es no ya frívolo sino el rey del simulacro, la afectación, la retórica, la apariencia, el ir de... por eso los progres tienen tan mala fama. Dentro de unos años progre será sinónimo de afectado, como de superioridad moral y, comprometido e idiocias anexas.
No me extraña Kamenev, yo haría lo mismo

Anónimo dijo...

LuÇian, y de la familia Bardem y sus semejantes, q me dices???, abanderados ahora del acercamiento de los presos etarras????......A la Mierda!!!....

Un beso.

R.W.