martes, noviembre 29, 2011

Autodigitalización



Colgué los recortes de prensa de más abajo, por lo que sigue. De manera completamente  autodidacta, tras varios intentos frustrados, he aprendido a escanear documentos en  este portátil, que ya sabía hacerlo  en el que precedió al anterior, pero tampoco en el del medio. Tengo despacho  a un cuarto de  versta de mi domicilio de sólo ocio, y tengo casi todo duplicado, y es un lío. Además soy de psicología soñadora- ensimismada y poco práctica. Me pidieron  en la editorial –que ya no es la que iba a ser-  referencias de prensa, para colgarlas en  su web en “reseñas”. A lo que se llama, según mi portátil, digitalización, lo que me parecen palabras mayores. Dadas las dilaciones con el libro sobre el Sáhara, he regresado a  la de mis amigos granadinos, que se han modernizado, nueva web  y  referencias  a ferias de libros nacionales y a las de Buenos Aires y Guadalajara. Han dejado la de Frankfurt. He charlado bastante con uno de ellos estos días. Siguen sin conseguir distribución en Canarias (que es lo que más me fastidiaba, por desamparo nomás -no les  compensa porque los distribuidores de aquí les piden muy escasas unidades)  pero lo hacen de manera material, fenomenológica  y real en la Península. Lo que es mucho. Además acceden –sigo con los mismos-  a las listas o redes  o algo así de mayor prestigio  de libros publicados, lo que explicaría el interés de determinadas instituciones por libros de ellos (y de paso míos). Me comentaron que han firmado un acuerdo con la mayor empresa librera de España. Es decir que los agentes específicamente literarios del proceso (editores y libreros y no los instrumentales: imprenta y distribuidores) se asocian para favorecer la relación, ya hoy muy diferente, entre autores y lectores. Así me han contado.
Me he digitalizado casi en  la totalidad. Guardaba recortes de todos mis aspavientos y actividades compulsivas, y hay variadas temáticas, como he exhibido en post anteriores.Dos cuestiones más para acallar los reproches sobre mi silencio de mi hermano y Nuestro Amado líder. No deben gustar de mis callados testimonios gráficos tipo "viejos archivos".
El fin de semana pasado me aventuré a la calle. Fuimos con mi hermano y Yael, la emprendedora  de prevenciones poético progresistas –para una judía que conozco y con la que amisto, resulta dual, superdual como todas y como se vio- nos fuimos al cine, a ver El Método Peligroso. Sobre Freud y Jung, en el periódico venía una crítica de otra película sobre la banda Baader Meinhof: La Fracción del Ejército Rojo. Ya me veía viendo las dos pelis seguidas, pero no la echaban. No me la perderé.
En el cine estaban los progres, pocos pero estaban, ya desvencijados, marchitos y plenamente derrotados, atraídos por Freud y Jung, muy vigentes en nuestra época. Yo, a diferencia de ellos, sí me introduje en el tema, por eso he resultado tan traidor y réprobo. A más de enemigo. De allí a un bar a beber cervezas sin comer y luego al Parra. Bronca. La dualidad femenina. Le dejé a mi hermano con ellas y me senté fuera con mi perfecta alteridad: la cerveza.
Me permito recomendar la película (mi hermano conocía al psicoanalista Otto Gros, del que no había oído hablar nunca) y el libro del gran autor Don De Lillo.

domingo, noviembre 27, 2011

Plataforma de abogados de Tenerife









sábado, noviembre 26, 2011

Mis antecedentes políticos cercanos

Me hallaba digitalizando mis diversas andanzas -me habían pedido sobre otra cosa- cuando me he encontrado con esto. Este post es complementario del que  figura más abajo, fechado el viernes 18-11-11, titulado Mi voto: al PP, me lo debía

jueves, noviembre 24, 2011

Twitter: mensaje y prosa fundidos


Que tengan un feliz Thanksgiving day
Me está pasando últimamente que abierto internet, no sé a dónde dirigirme. Falta de mundo, pienso entonces. Para depurar mis entradas en el blog (que no computen las circunstanciales u oportunistas) he suprimido entradas convocadas  por determinados nombres o imágenes: nombre de ciudad mejicana, nombre y foto de animal totémico, país centroamericano y actriz erótica que siendo muy buscados llegaban a mi blog y computaban como entradas mías cuando no lo eran. Lo he hecho otras veces.
Me sigue entrando gente en el blog, no son muchedumbres pero son bastantes, y muy estables, salvo que salgan unos y entren otros.  Si fueran muchos más lo cerraría. Detesto las mayorías (de joven ya las encontraba faltas de sazón, que podría decir José Rivero Vivas) y su promiscua  garantía de  mediocridad.
Pro twitter
Facebook es como la comida basura o ejércitos de Belén Esteban (aunque a mí me caen  muy bien tanto ella como su niña), es ese nivel popular  áspero y ordinario, prefascista o populista (de izquierda claro), donde cualquiera puede tunear su vida.  Facebook es una máquina de las peores mayorías. Lo más prosaico y pedestre se socializa, y sindicados quedan  afectos o ilusiones que siempre debieron quedar sepultados en el yo más celoso de sus peores secretos.
Así como en el blog los lectores son apreciables, en twitter tengo 19 seguidores (yo sigo a más , muchos judíos), dos se me han ido, debió ser por incompatibilidad, y cuando me quedé en 18 apareció el 19, otro.
Twitter exige una determinada prosa y mensaje. Apotegma, aforismo, retruécano, enunciado limpio, depurado, proclama sentenciosa, proposición de verdad inmediata y compacta como un submarino, un balbuceo anodino, el acontecer que retiene sin motivo nuestra atención, y que puedan  refulgir como poesía.
El propio formato exige reflexión y el contenido obliga a la eficacia. La idea para que resuene precisa de la retórica, de forma. En todo ello hay voluntad de estilo Eso es twitter. No como la algarabía pestilente de las pancartas de escritura lábil  posmodernas, versión pacifista o progre asambleario en general.  
Twitter hace del ciudadano combatiente de la polis, señor del espacio público porque puedes llegar a entrometerte (con tus peores artes, por supuesto) en cualquier debate.


miércoles, noviembre 23, 2011

La Política debe regular los Mercados, sostienen

Dicen los viejos estatistas y periodistas como hoy Cebrían, que la Política debe regular los Mercados. Aunque ya opero plenamente desdoblado entre twitter y el blog, allí ya lo he contestado, pero no aquí.
Los Mercados son los mismos que propiciaron la opulencia, la orgia del despilfarro, los servicios públicos y el bienestar más que trampeado hasta antes de ayer. Los Mercados no hacen leyes, ni fiscalizan actividades, ni tienen decretos, manejan estadísiticas públicas, Banco de España, controles sobre la banca y el ladrillo...
Yo entiendo la irresponsabilización de la política ante sus funciones indelegables, también sé de su incompetenecia sin noción de responsabilidad. El gobierno ha dado una lección palmaria e irrefutable de ello al mundo y la Historia
La política hace ahora que pasaba por allí, lo que no es cierto. La política estaba de cuerpo presente con algunos sindicatos en la cúspide dle ladrillo, vías Cajas de Ahorro. Donde la Política ha demostrado su ineficencia claramente delictiva, búsqueda del lucro de casta hasta límites insuperables. Vamos, los avales de competencia y honestidad de la Política, que debemos ponderar y admirar.
La política tiene que regular  la política, que es lo que no ha sabido hacer.  Sería un suicidio y una irresponsabilidad, que con los antecedentes objetivos de la Política de máxima alegria, que se encarguen de los mercados. Los políticos los pondrían a su servicio y coparían sus cargos, se otorgarían prebendas, pero (y esto es insuperable) tendrían que demostrar una capacidad profesional que para los Mercados se exige, ellos no tienen y  no necesitan en absoluto para la política. Que por cierto los mercados han certificado no tenerla.
¿Alguien es capaz de establecer en todos estos años de ladrillazo, con los políticos copando los Mercados, todo lo que habrían desviado, los palacios y castillos que se hubieran construido, como islas artificiales, los helicópteros y jet que hubieran tenido, la prostitución de lujo que habrían degustado, los implantes de pelo que se hubieran hecho en Hawai?
¿Alguien duda de que también habrían esquilmado y arrasado los mercados, y estaríamos directamente rezando? ¿Qué chiringuitos se hubiera abierto Aído?
Excepto si se los diésemos a Izquierda Unida, grandes estatistas (es como es factible colarse) los más lúcidos, preparados y puros (y sencillotes), al menos en las nebulosas de máxima abstracción y máxima virtud. Con Pop-anagramas premio Nobel.

viernes, noviembre 18, 2011

Mi voto: al PP, me lo debía

Mi juventud política
Siendo niño entraban  panfletos en mi casa y oía   de interrogatorios y exilios. Más tarde supe  de  presos hijos de amigos o conocidos de mis padres. Aún adolescente asistía a concentraciones nacionalistas vascas en montes donde se  colgaban ikurriñas (lo único que hacían), a una conmemoración en Gernika y a más actos clandestinos en los que no pasaba nada, mucha policía y un par de gritos. Luego acudía regularmente a la única liturgia antifranquista que se realizaba todos los domingos en Bilbao: La misa de 11 en San Antón (la iglesia que está en su escudo), donde D. Claudio se enfrentaba  como un Titán de la homilía al Régimen, que no paraba de multarle. La oposición en el pretendido gran bastión de resistencia vasca  antifranquista,  Bilbao, no pasaba de 150 personas. Eso lo he vivido yo. Bilbao podía ser del Athletic, pero antifranquista, no, nada de nada.
Mis padres recibieron una llamada durante las escuálidas movilizaciones contra el Proceso de Burgos,-los mismos 80 (o menos) estábamos en todos los sitios casi a la vez- advirtiendo que a mi hermana y a mí  se nos  veía mucho. No fue la policía, sino algún vecino de la Villa.
De allí, San Antón, salieron los primeros contactos. Luego vinieron el abertzalismo y el izquierdismo. Y una politización extrema: como una segunda sexualidad. La revista Triunfo, Cuadernos para el Diálogo, el robo del libros, París, panfletos , el interés por todo conflicto político, el Proceso de Burgos, los saltos incansables, la vigilia en la Residencia, reuniones, formación izquierdista… No milité en ningún partido y en el único sitio que estuve eventualmente encuadrado casi no debería ni decirlo,  que no me libró de detenciones ni de la guerra de intimidaciones  de la policía-sector extrema derecha. Llamaban de madrugada, no decían nada, volvían a  llamar,  con mucha intención repetían, luego se esfumaban, cuando creías que ya no existías reaparecían,  era inquietante.

Entre la V y la VI Asamblea de ETA
Cuando registraron mi casa, la víspera de 1º de mayo de 1974  no quedaba -sólo por unos días de anticipación-, ningún paquete de panfletos: ni de ETA V asamblea ni de ETA VI asamblea. Hubiera sido doblemente embarazoso, me temo que incluso para la propia policía: vaya caos en la línea de investigación.  Había tenido de los dos. Me los dio a  guardar uno de la   VI. También me pasó que cuando yo creía encontrarme  por una V asamblea  susceptible de escorarse más a la izquierda, en realidad andaba por una VI  ya plenamente escorada. Duró poco, porque cuando estudiábamos la forma de entrar en el establecimiento  – asalto que posteriormente  consumarían etarras dignos de ese nombre, alguno de la célebre  Fuga de Segovia después--, yo debía cargar las multicopistas, nuestro jefe  se escapó de la policía a tiros en el Casco Viejo de la Villa. Pero ésta fue otra historia. Así que la policía de  madrugada, en festivo 1º de mayo (la Jefatura vacía que daba pánico) me enseñaba mis cuadernos políticos que había encontrado en el registro.  No solo fueron a buscarme al portal, sino que habían regresado. Me gustaba la teoría, no había duda, no encontraron más  y despreciaron los libros, un intelectual dubitativo. 72 horas a su merced y ni me tocaron, salvo a la llegada: pataditas, empujones  y chanzas en las oficinas antes de bajarme a los calabozos. Me sentí despreciado como antifranquista. Sin embargo, en otra ocasión, con la Guardia Civil, en un par de minutos ya me había llevado unas cuantas hostias de notable relieve y consistencia.
Me siguieron dando prorrogas para la mili, lo que no dejaba de extrañarme, así que cuando fui a la mili, ya sin Franco, llegué al cuartel y vi las cosas un tanto  raras y un capitán primero y otro días después, me llamaron por separado para referirse a mi “ficha de la hostia”  según dijo el primero  –no real, la supongo conjetural  y artificiosa-  y que allí nada, por mi bien. Vine a hacer  en total meses de guardias, pero me dieron el pernocta. Mi madre me había buscado un enchufe gracias a JMM.   Mi caso no fue  muy típico. Ahora estoy persuadido de  que nunca nadie me ha hecho una ficha mejor que la Brigada Político Social (o ya BIS),  que supongo   me intuyó (y acertó)  disconforme, especulativo, insatisfecho, improbable y  heterodoxo.

Prejuicios a fuego o análisis dinámicos
Lo que entonces me reprochaba: el  no militar en sólidas iglesias, comprobé de mayor que resultó en lo que más coherente fui conmigo mismo. Me interesaba la teoría y me dedicaba a pensar en un partido ideal socialista y aberztale  –y cuidado que había-, y  tras evolucionar al eurocomunismo acabé simpatizando con el PSOE, incluso fui en sus listas para el pueblo de veraneo más próximo a  Bilbao en el 2001.
Todos aquellos jóvenes  comprometidos, críticos, con buen  equipaje intelectual, formación marxista, que yo admiraba, leía y seguía  terminaron todos   por abandonar esta izquierda. A partir de unas premisas, experiencia y conocimiento has de evolucionar forzosamente. La política deja de ser un ámbito de lo sagrado y se hace profano. Salvo para los reaccionarios y conservadores actuales (la izquierda) que lo mantiene lógicamente sacralizado. Bajo el dogma medieval, azorados por prejuicios, crías del escándalo. Quedaron los que repiten las mismas salmodias que actualizan como papagayos- ahí se les ve la talla y capacidad de los fosilizados- conforme el discurso oficial va imponiendo nuevos lemas y opiniones.  Llegaron otros: burócratas,  exderechistas, exapolíticos, profesionales de la política, oportunistas, mediocres,  posmodernos de barnices  progresistas que, alegres, incluso lo ignoran. Yo no tengo nada que ver con estos advenedizos y  oportunistas, ignaros y zafios por igual.  Hasta ayer incapces -únicos en Europa- de admitir a la derecha ("extrema" decían descalificadores, manipuladores) que la pusieron en cuarentena, que la negaron como opción, que la deslegitimaron. ¡Los señoritos engendrados por aparatos burocráticos, a los que les sobraba la derecha!
Tarde, pero fui descubriendo a la verdadera izquierda española, en absoluta mejor que la derecha, sino bastante peor,  una izquierda sin un  solo pensador en toda su historia (un caso insólito), sin teorías,  inculta, anarcosindicalista y revolucionaria de lucha de clases, infantil, radical, sectaria, excluyente,  muy peligrosa.
El pensamiento político español, ha sido de derechas y liberal, ha sido de Ortega y Gasset; Marañón, Salvador de Madariaga, Pérez de Ayala… la verdad se está reestableciendo poco a  poco, el último que lo ha hecho es Andrés Trapiello. Es cuestión de tiempo. ¡Cuántos intelectuales exiliados, sí, pero de la II República también y antes! 
Lo que no perdono a estos  es que en su  indigencia intelectual  y falta de preparación   banalizaran  a la extrema derecha, nunca la tuvieron cerca y saben que no la tendrán porque no estarían. Llaman fachas  porque ignoran lo que es el fascismo de verdad y porque tampoco estarían. Y no pueden imaginarlo siquiera. Me importan menos  sus mentiras, manipulaciones, frivolidad, afectaciones, ni su  insolvencia, irresponsabilidad, buenismo tontorrón e incapacidad inadjetivable.
Yo  tenía que votar a la derecha, VOTAR AL PARTIDO POPULAR, me lo debía.

jueves, noviembre 17, 2011

A mis últimos excorreligionarios

Sé que todos sin excepción terminasteis  por marcharos, como  sé que los nuevos en nada se os parecen, al  menos aquí en la latitud  subtropical.   Y  sé lo que hay que hacer en política siempre: que es  irse. Fuimos coherentes, nos repugnaba el zapaterismo y su ideología que  calaba en los espíritus más romos del país. ¿Cuáles de aquellas muchas añagazas, inventos adanistas,  presunciones, sentimentalidad exhibicionista, idiotas Ideas fundacionales, nuevos horizontes   antropológicos a merced de la fabulación de los más ignaros, quedan hoy?  Quedan sí sus votantes, ese pueblo antojadizo, voluble, timorato, aquiescente,  sumiso  a la moda, fácil a los nuevos rezos y prestidigitaciones, que gusta del sudor y la afonía compartidos.  Ellos afilaron el espíritu humano como no se conocía desde los Medici, Pitti, Alberti… con las ideas y el pensamiento   “lafotodelasAzores”, “RajoyAcebesyZaplana”, "lamemoria" y la revuelta antifascista de  extrema   grandiosidad épica  y   valor de maquisards 
UPyD  restauró la inteligencia, el primado de la razón,  la crítica política y el espíritu ciudadano forjado en la  exigencia cívica en tierras circenses donde gobernaban los payasos que hacen de listos: los milikis, ni siquiera los  fofós y fofitos.
Yo nunca creí en el partido, era imposible que fuera bisagra y que tuviera vida al margen de Rosa y  Gorriarán, no tenía sentido además, era coyuntural y recogía el hondo rechazo al progresismo posmoderno ñoño y ramplón de ZP, sobre todo para los que proveníamos de la izquierda.
Como un leninista dado a todas las alianzas y a aunar compañeros de viaje,  compartía el partido con otros y  pagaba cuota  a Ciutadans de Catalunya (a esos les votaría hoy) y al maoísmo anti posmoderno de Unificación Comunista.
 La misma semana de las elecciones  en 2008 ya sentí mi presencia en UPyD  amortizada. Me siento lejos de ese partido desde entonces, pero  cumple una función importante, aunque las bases para su imprescindible advenimiento hayan desaparecido ya en gran medida.
Comí con Savater, nos concentramos sin autorización ante la subdelegación de Gobierno  para protestar por la agresión de las hordas totalitarias izquierdistas a Rosa en  el establo ideológico de Políticas  de la Complutense, y combatimos  a los castristas en  la calle del Castillo. Pude parecer imposible pero ocurrió. Gracias UPyD  por aquellos momentos. Y suerte. Que sigáis ascendiendo.

El dulce voto antisistema. Ni PSOE ni PP

Llevo oyendo a algunos –hace poco a una funcionaria- mostrar su indomeñable talante crítico afirmando enérgicos que no van a votar ni al PSO ni al PP, ni a los que han gobernado ni a  los que en absoluto han podido hacerlo. Es un dato a tener en cuenta, significativo, más allá de lo político. Es curioso. La política es un terreno para la invasión de afectos, pasiones  y magníficas sublimaciones. Las pasiones se trasvisten de racionalidad y argumentos, de razones, sí.  El 15-M  se extiende por otros medios. ¡Eran tantos sus simpatizantes! Ni al PSE ni al PP, es decir: no  al sistema, bueno sí, a uno multipolar y abierto. El panorama podría  ponerse  interesante. Por fin hay datos a la altura de un país sediento de chivos expiatorios, de inconformismo ante eventuales reparaciones o soluciones  menores, y ávido de soluciones en verdad  salvíficas. Saben lo que se les vine encima y se saben poco japoneses, nada alemanes, tampoco anglosajones.
Evidentemente a estos antisistema lights y burgueses  que aplican  responsabilidades tan amplias, les gustaría un conductor que les pudiera satisfacer, ¡GarzóN!,  entre tanto quizá se dispongan  a castigar todas las sombras concretas de sus frustraciones. No conocen a los mercados, no tienen corporeidad, imagen ni nombres. Se  resignan, necesitan abarcar a los causantes de su decepción y frustraciones, contra el padre y la madre. Es una apuesta inconsciente por el fraccionamiento,  la alternativa difusa y aleatoria, punitiva, por elementos de desorden de donde pueda surgir el verdadero orden.  ¿Una secreta aspiración, el anhelo inconsciente?
 Con el PP y con el PSOE antes que con el pueblo y su terribles instintos.
Bueno, son cosas mías sin demasiada importancia.

miércoles, noviembre 16, 2011

Coalición Canaria, un voto razonable


La modernidad es invocable y artística, conecta con el güisquito y una clase media  ávida de cierta distinción (cultural, que entra dentro de  sus posibilidades); la modernidad ha sido estilo y somnnolencia local, de café y club, capaz de exhibir unos lazos cosmopolitas que solo se podían dar en el arte –es hora de asumir limitaciones o al menos  un poco de autocrítica-  y al atardecer.
La  modernización es otra cosa, más matutina, empírica y de naturaleza material. En  España y  en las islas una cosa muy rara. No resultó así para el pequeño grupo de ingenieros industriales, que sin saltarse la modernidad (generalmente muy  inocua) optaron por lo imposible: la modernización del país, lo que no se les  reconocerá en las próximas décadas, ya que  estamos sobreabundados de poesía. Es nuestro mundo benigno  del  atardecer hecho playa (y libro más o menos lírico)


martes, noviembre 15, 2011

A favor de Coalición Canaria


El pasado mes de  agosto  (y aquí lo reflejé) en Las Amériocas convalidé mi opinión que de forma incipiente había adquirido sobre  Coalición Canaria. Habían modernizado esta región y habían conseguido crear un  emporio industrial con el turismo en el sur.  El sur desprendía  energía, y allí es donde resultaba más perceptible el  progreso y el desarrollo, el objetivo del turismo de “calidad” lo habían conseguido. Curiosamente, y creo que no por casualidad, era obra en buena parte de un grupo de ingenieros industriales eficaces, prácticos, previsores con ideas de planificación y futuro, dispuestos a  transformar el país. Modernizadores de verdad.  Mis simpatías por Coalición  Canaria -lo aclaro- no me obligan a ninguna lealtad. Soy foráneo, me siento foráneo y pienso  seguir siéndolo (si no acrecentándolo).  
Si Coalición Canaria representa el desarrollo con méritos a la vista, al lado de ella hay otro sector totalmente reactivo, pleno de fantasías y utopías enemistadas con  las limitaciones de la realidad, que se solaza en la inmadurez de sus propuestas.  Me estoy refiriendo a esas agrupaciones cívico moralizadoras  (algo en verdad límite), ecologistas, antiportuarios, perpetuadores de  la abulia vital de barrios, izquierdistas hipnóticos, independentistas,   nostálgicos de todas las nostalgias sobre paraísos posibles en los que el placer naturalista y la beatitud  abolirían la parte sufriente de la raza humana.
Tengo una idea ahora muy  atávica de lo que es progresismo, convicción que no tiene otro origen que  el marxismo que profesé de joven.  Este sí fue  una pregnancia ideológica duradera. Vete ahora a  los que se intitulan de izquierda y progresistas a ver que te dicen de lo que es ser progresista, que no esté absolutamente tintado de posmodernidad y ñoñería, calafateado quería decir.
Progreso es lo que contribuye al desarrollo material de las sociedades, al crecimiento  económico y social, a la  educación y al bienestar. Por tanto forzosamente el progreso ha de alcanzarse sobre una base material y ha de ser desarrollado por las fuerzas más  dinámicas, las más aptas  e históricamente idóneas (no con mulas y gallos) para poder lograrlo.
El que  no está en este desiderátum será un moralista, un esteta, un soñador, romántico, un humanista de buen corazón, mirada limpia y cierta ñoñería, pero no será un progresista  porque jamás harán nada para obtenerlo, en términos empíricos, pero sí para retrasarlo o evitarlo y, lo que es más tonto,  sin quererlo.
Son los más peligrosos porque en sus sueños adolecentes anteponen sus sencillos y luminosos ideales a las responsabilidades, la conciencia varada  y fosilizada a la resolución de las cuestiones de interés público. Pero hay sectores sociales infinitamente reaccionarios, objetivamente conservadores, que gustan regresar (auténticas regresiones psicológicas) a los estadios inocentes  de su propia adolescencia. Y espacios que los acogen.
Recomiendo el voto a Coalición Canaria, frente a esas expresiones milenaristas de autenticidades populares y locales, heraldos de paisajes, a la postre,  lunares.
Aviso a excorreligionarios: no se precipiten con sus caricaturas y dicterios.

domingo, noviembre 06, 2011

Mi último libro: Línea Líquida


Estoy terminando de corregir y de dar pinceladas sutiles pero certeras, eso me creo y espero,  de las que son capaces de arbitrar emociones, a mí último libro de  narrativa que se llama Línea Líquida (no se lo debo a Zigmunt Bauman como  los intelectuales pensarán, sino a un letrero que creí leer, que luego resultó de parecida leyenda). En su lentísima construcción se le han colado tres libros de ensayo (uno tipo panfleto). Le calculo al artefacto 300 páginas  por lo que voy contra mis propios  principios (siempre entre 90 y 120 pág.; el del Sáhara saldrá por 150 con prólogo, o un poco más).
He realizado todas las podas y amputaciones que he podido, pero el artefacto se resiste como un viejo roble.  Era precisa la proyección de un tono, de un determinado aliento si quiero hurgar en el sentimiento de quien lo lea, si quiero conducirle a ningún puerto sólido, al acontecer, a lo  intransitivo que aun así sea pasto de cierta trepidación. Como la vida ordinaria, de los que no estamos por ese tipo de asientos.
Qué tipo de narración es -para definir el dato perentorio de la sweet sistematización dogmática- se preguntaría Jesús si no supiera más o menos de que va, pues una novela, le contestaría a otro que no fuera Jesús y lo hiciera. Una novela que al no ser una  novela solo puede ser una no novela (no hay historia) y no otra cosa, porque guardaría con las otras modalidades narrativas  mayor distancia. No hay historia, no se busca y construye una historia, porque la historia está, siempre está donde hay acontecimientos. Y aparecen distintos sujetos danzando por ahí además.
La narración va sobre hechos de vida, pero no es un diario, porque el libro corre  veloz de principio a fin y no hay cronología ninguna, ni consignación de hechos desconectados y parcelarios. No hay capítulos. A lo más espacios en blanco por la longitud. Lo que es todo un reto, ser capaz de mantener el interés sin que nunca desfallezca.
Tampoco es memorialista, porque no se exalta el pasado vivido, la gente conocida y gloriosas hazañas protagonizadas, en el libro no hay una sola hazaña, ni la más mínima gloria (tampoco deshonor), ni reflexiones profundas sobre la vida. Ni media meditación ni mínima tentación psicológica.
Tampoco es un libro confiscatorio de un blog, porque no hay espontaneidad aleatoria, quiebros, abandonos, escaparate de reflexiones o avatares. Y los protagonistas están ayuntados como bueyes, no son  vulgares figurines.
Pero juego las que creo que son mis mejores bazas, cierto ingenio, algo de humor, no mala capacidad de análisis y discurso, y un punto de vista que me mantiene siempre en desorden y a contra luz de todos los centros estipulados. Y algún otro mérito del que, existiendo realmente, no tenga conciencia de su flotar.
Este descripción podía haber sido mi libro, ajustarse todo él  únicamente a lo acabado de escribir, o a su anuncio nomás, un libro sin materialidad como el arte conceptual de los años 70, cuando  en el propósito o la idea se consumaba la obra, no es así, mi libro existe y va a nacer. ¿O bromeo?

sábado, noviembre 05, 2011

La asociación canaria de solidaridad con Israel

Por fin tenemos visibilidad sobre papel, La Gatera sale también en ese soporte.
Nuestra sociedad gana en pluralismo y las unanimidades se limitan, ya hay más voces. Nosotros somos una que estaba radicalmente ausente, para muchos inconcebible.
 Era imposible el dominio monista  de una sola categoría o dogma de verdad durante tanto tiempo. Las  verdades morales que  gozan del favor de la práctica unanimidad tienen la ventaja del a priori de indiscutibilidad, no tanto de la argumentación y el conocimiento para defenderlas. No las precisan, se defienden solas desde las almenas  de la absoluta y exclusiva legitimidad moral y ética.
La moral sustentada en las emociones y la pasión que se organizan en grandes comuniones, consensos y estados de ánimo, siempre son sospechosas. El debate moral ha de ser público y en torno la argumentación racional. E Israel nos invita a ello.
Sonia Muñoz me tiene como colaborador del Boletín Cultural La Gatera, lo que le agradezco, pero ahora tengo una sensación de debérselo de manera especial como si transgrediéramos algún tabú.
Solo por esto nuestra iniciativa merecería  la pena.
Tras superar pequeñas trabas burocráticas, pronto celebraremos las primeras reuniones y fijaremos los primeros objetivos, que serán culturales. Contamos para ello con importantes colaboradores. Nuestra asociación ya ha crecido y de manera relevante desde el punto de vista cualitativo.   
ACCESO  LA GATERA

ACCESO A LA WEB DE LA ASOCIACIÓN

jueves, noviembre 03, 2011

Mi sincero homenaje a los "Mercados"

Mientras mi vida solo atiende al principio de realidad, como la realidad de una pista americana diaria por cierto, el mundo parece sucumbir ante ese principio, en el fondo benefactor.
Benefactor por todo su poder desmantelador de desvaríos, alucinaciones, delirios,  psicosis (que lo serían de forma individual, pero  no cuando son colectivas), imposturas, simulaciones, disimulos, engañifas, trampas, trapacerías…
Cuando el principio de realidad irrumpe y se entroniza como un faro rematado por un nido de ametralladoras, el baile de disfraces, las comedias y los sainetes  implosionan expeliendo adarmes de materiales de ínfima calidad en los que se cobijaban vaporosas  ilusiones.
GRACIAS A LOS ODIADOS MERCADOS y A LA DEUDA PÚBLICA Y PRIVADA alcanzamos los niveles de  consumo, servicios, carreteras, AVE, colegios, sanidad, coches, viajes, consumo compulsivo, fines de semana empotrados en grandes superficies o en aviones puentes y vacaciones, prácticamente todo.
Entre tanto los que creaban toda la confección textil, los barcos, electrodomésticos, o cien mil componentes de la mayoría de  los productos trabajaban y trabajan en Asía, África y América a cambio de 200 dólares.
Nunca nadie ha hecho tanto por nosotros como los Mercados.  A ver si las flotillas de Audi, BMW, los 4x4, los plasmas de última generación, los Ipod, blacksberrys, bulberrys  las inversiones  en ladrillo las adquiríamos porque ahorrábamos mucho para pagar al contado después. Gracias a la deuda privada ha sido posible todo eso, no a valores morales católico-izquierdistas, ni al ahorro, ni evidentemente  a la banca política: las Cajas de Ahorro, que vienen a demostrar  la superioridad salteadora de la Política, con el ramillete de beneficiarios, patrocinados, enchufados y asaltantes.
Qué hubiera hecho la poblada jungla de administraciones españolas, ese nuevo gran imperio español sin la DEUDA PÚBLICA.
Pensad en la Consejería más suntuosa que hayáis visto, que os evocaba la Suiza o Canadá de dentro de dos décadas, sofisticada de diseño y materiales nobles, obras de arte de firma, o en aquel hermosísimo instituto, o en exterior tornasolado  de un hospital, en las flotas de coches oficiales, las policías de nacionalidad, la televisión de nacionalidad… ¿quién y cómo se habrá podido financiar?
Y al final, hemos dejado a los Mercados en la estacada, porque nos hemos ido sin pagar, empezando por Grecia.
Solo Izquierda Unida nos puede sacar del marasmo. Fomentando el empleo y haciendo la reforma fiscal para que los ricos paguen a los pobres, entre los que procuraremos estar no bien ya estamos. Han echado cuentas. Por fin alguien  sabe sumar y restar y se deja de complejidades. Mi voto hoy, que se inicia la campaña, es para Izquierda Unida. Voto a la Política. Mueran los Mercados.

martes, noviembre 01, 2011

El único delirio tolerable es el individual

Pocas ofensivas he conocido tan virulentas, persistentes, generales (diremos holísticas) contra el principio de realidad que las acometidas, al calor del discurso dominante durante  el septenio de posmodernidad   meliflua y lacrimógena, por el gobierno de los insuficientes delirantes.
Éstos, los más  capaces –que se han hecho un hueco en la historia local de la  infamia -, sobrados de dotes para el gobierno como han  demostrado,  se dedicaron a refutar al mundo, a sus universidades y museos, a  la Historia, a la memoria  (cartografía,  tratados internacionales, heráldica, realidades objetivas) y a las nociones básicas de los demás países, reordenando los mapas políticos y las constancias históricas de España que el mundo también había creado y conocido. Éstos, los más capaces, adanistas  -que es la incultura ya solidificada- reinventaban España (estos Ortega y Gasset, estos unamunos, azorines, madariagas, marañones, estos menedez pelayos y pidales… intelectualmente camisas pardas) diciendo entre otras cosas que España   era un concepto discutido y discutible, lo decían con la ampulosidad  solemne de los más zafios, como si vivieran  en los bares de Hernani, en los lúgubres batzokis de Bilbao, en la sacristía de Montserrat  y en la Casa del Pueblo de  Las Rozas. Inventaban naciones que jamás existieron, desconocidas por el mundo. Inventaron una memoria histórica que era pura ignominia, sectarismo y  revanchismo enfermizo  y una falsa II República, inventaron éticas y confiaron en la ingeniería social en la enseñanza, inventaron estados  grandes superficies en el que el poder de sonrisa falaz paseaba por pasarelas afectando encanto de izquierda, lo inventaron todo.  
La realidad implacable de la crisis les ha arrojado al basurero de la pasayada, bajo las coordenadas de la realidad objetiva todas los enunciados, inventos, debates que relucieron en el horizonte aparecen ya revocados, mendaces, increíbles, a una cota de la estupidez del Poder capaz de compertir a escala mundial en la Historia.
A medida que la realidad se vaya imponiendo, por la crisis, más alucinante nos parecerá, a poco que hagamos memoria, las preocupaciones, debates, tesis,  valores, tan delirantes  y bobos, del día a día durante este tiempo.
No podemos tolerar que el delirio de cuño oficial de las masas jaleadas por el poder  de los ineptos expandido en masivos estados de opinión ahogue nuestros delirios más personales y auténticos.
El principio de realidad en el espacio público y en la sociedad es innegociable, gracias a él podemos habitar en nuestro propio delirio, la imaginación y en la fuerza de la creatividad, siempre a título individual.